A las puertas de las elecciones catalanas del 12 de mayo, la comunidad educativa tiene la intención de hacer ruido para dejar claras sus demandas para el nuevo gobierno de la Generalitat. Es por eso que el sindicato mayoritario de Educación, USTEC-STEs, ha convocado para el próximo jueves 9 de mayo una parada del personal educativo. Desde la organización sindical critican la «precarización» de las condiciones laborales del colectivo de personal de atención educativa de la consejería, todavía en manos de Anna Simó a la espera de los resultados de los nuevos comicios: «El personal de atención educativa, profesionales calificados como el resto de personal del Departamento de Educación, somos un colectivo minoritario, invisibilizado e infravalorado dentro de un contexto clasista, capitalista y que apuesta por la privatización de los recursos«, espetan desde el sindicato a través de un comunicado.
Desde USTEC reclaman que la administración consolide la «reclasificación laboral» del personal, puesto que, según apuntan, a pesar de que está estipulado en la ley vigente, no se ha llevado a cabo. Denuncian que, actualmente, las categorías clasificadas al VI Convenio único en el Ámbito de Cataluña 2004-2008 en el grupo C, es decir, educadores de educación especial (EEE), integradores sociales (INS), y técnicos especialistas en educación infantil (TEEI), los correspondería formar parte del grupo B. A banda, la reclasificación que reclaman también hace referencia a los fisioterapeutas, que actualmente formen parte del grupo B a pesar de que los correspondería -según la ley- formar parte del grupo A1. Desde el sindicato denuncian que no formar parte de la categoría que los corresponde supone un agravio económico por el colectivo: «Este hecho supone una carencia de reconocimiento de nuestra profesión y una pérdida de poder adquisitivo de unos 300 € brutos mensuales que afecta, desde hace aproximadamente 20 años, unas 3.000 familias«, apuntan.

Las reclamaciones del sindicato
Desde el sindicato denuncian la «carencia de reconocimiento de las educadoras de 1.º ciclo de la escuela rural» y reclaman «una mejora de las condiciones laborales», es decir, los horarios, las funciones y los refuerzos, entre otros. También denuncian la «carencia de consideración, en la no reducción de las horas de atención directa a los mayores de 55 años, sin tener en cuenta el trabajo» que se desarrolla. En este sentido, desde el sindicato reclaman que se aplique la misma reducción horaria que al personal docente, acordada con la consejería en el pacto por revertir los recortes del 2010.
A banda, reclaman un incremento del personal de atención educativa y que se reconozca la etapa educativa de la guardería, estipulada en el decreto 282/2006: «Continuemos reuniéndonos con los partidos políticos para que nuestras reivindicaciones sean incluidas en los programas electorales y, sobre todo, en las propuestas de gobierno. Exigimos a la clase política que nos escuche y abra la puerta a establecer vías para llegar de manera urgente a acuerdos firmes para conseguir la consolidación del derecho a la reclasificación profesional del personal laboral del Departamento de Educación, así como el resto de reivindicaciones de todo el colectivo», remachan.