El Departamento de Educación, dirigido por la consejera Esther Niubó, ha dado los primeros pasos tras la movilización masiva de los sindicatos de docentes del pasado 15 de noviembre. Tal como explica la Agencia Catalana de Noticias (ACN), los responsables de la consejería han hecho llegar a las organizaciones sindicales representadas en la mesa sectorial de enseñanza una primera propuesta para negociar la mejora de las condiciones laborales del profesorado. Entre las propuestas de negociación que sitúa la cartera que encabeza Esther Niubó destacan las compensaciones por pernoctación, que se producen durante las estancias de colonias, la revisión del sistema de estadios y de la carrera docente -una de las grandes reclamaciones de los sindicatos-, la revisión también de los diferentes complementos existentes y estudiar la reducción de ratios en la enseñanza obligatoria.
Según detallan, los sindicatos recibieron estas propuestas el viernes de la semana, los cuales tienen previsto valorar estos aspectos que les ofrece el departamento en una breve rueda de prensa este jueves, convocada por el sindicato mayoritario del sector, USTEC, Comisiones Obreras (CCOO), Unión General de Trabajadores (UGT), el sindicato de profesores de secundaria ASPEPC y la Conferencia General del Trabajo (CGT). De acuerdo con el calendario planteado por el Departamento, el cual ha generado diversas reticencias entre las organizaciones sindicales, que acusan a Niubó de querer «dilatar» las negociaciones al máximo para «desmovilizar» al colectivo docente, los sindicatos y la administración abordarán estos aspectos en un encuentro la semana próxima. Este es el primer movimiento de la consejería tras la manifestación masiva del profesorado, que reunió a cerca de 30.000 personas, según las cifras de los organizadores.

Sin rastro del aumento salarial
La primera propuesta del Departamento de Educación no hace ninguna referencia al aumento salarial del 25% que piden los sindicatos de docentes para recuperar el «poder adquisitivo perdido». Esta fue la principal reclamación que llevó a miles de maestros y profesores a salir el pasado 15 de noviembre, en un primer pulso con el gobierno de Salvador Illa para mejorar las condiciones laborales de los trabajadores del sector. Desde entonces, la relación entre los sindicatos y la administración ha sido más tensa de lo habitual. De hecho, tres días después de la protesta estaba prevista una mesa sectorial con las organizaciones sindicales del sector, pero no se llevó a cabo, ya que los sindicatos declinaron participar porque el orden del día no recogía ninguna propuesta sobre sus reclamaciones. Con esta nueva propuesta, pues, la responsable de la cartera de Educación busca tender puentes con los docentes y apaciguar el malestar de los maestros, que amenazan con más protestas e, incluso, una huelga.

