Las matemáticas son uno de los puntos débiles del sistema educativo de Cataluña. Ante la bajada de las pruebas PISA, la ex consejera de Educación, Anna Simó, optó para poner en marcha el Pla Florence, un programa pensado para paliar las carencias a través de la enseñanza interactiva y un incremento de horas lectivas de matemáticas en los centros «con más margen de mejora». Las previsiones iniciales del departamento eran poner en marcha este plan de refuerzo en 200 centros educativos, de los cuales 120 de primaria y 80 de secundaria. Estas previsiones, pero, no se han cumplido. Según ha avanzado
Concretamente, de las 120 plazas ofertadas para centros de primaria, solo se han llenado 32. Y, en cuanto a secundaria, solo han optado en esta plaza 48 institutos, de los cuales cinco son institutos escuela. Según explican fuentes de la consejería, para mantener cierta normalidad en el funcionamiento previsto, los centros que se han inscrito en el plan de refuerzo empezarán esta actividad a partir del inicio del curso -el día 9 de septiembre- como medida «piloto». Es decir, servirán para detectar si el planteamiento establecido sobre este programa es efectivo y aporta beneficios al alumnado que tiene más dificultades en esta materia. A banda, este mismo septiembre el departamento, ahora en manos de la consejera socialista Esther Niubó, abrirá una nueva convocatoria porque todos los centros que quieran incorporarse a este programa de refuerzo puedan hacerlo. Los que se inscriban podrán decidir si engancharse a partir del mes de enero o empezarlo el próximo curso: «Nos queremos adaptar a las necesidades logísticas de los centros», apuntan desde la consejería.

El objetivo del plan de refuerzo de matemáticas
El objetivo del plan de refuerzo que hereda la nueva consejera de Educación es mejorar los resultados en esta materia. De entrada, el plan se tenía que poner en marcha en doscientos centros, pero con los ojos puestos a extenderlo en todo el territorio en los institutos y las escuelas que lo requirieran. El método con que el departamento apoyará en los centros educativos, además de un refuerzo de personal docente para poder incrementar el volumen de horas lectivas de esta materia, la consejería también hará llegar a los centros inscritos -a los 87 actuales- una maleta equipada con material manipulable para que los alumnos puedan trabajar en las competencias matemáticas que más los cuestan, bien sea numeración y cálculo o relaciones numéricas -que son los aspectos con peores resultados a las pruebas PISA en primaria-, o en cuestiones como el sentido numérico y el sentido espacial de la medida, que son dos de los puntos más débiles detectados en alumnos de secundaria en estas mismas pruebas.