Nada que hacer. Este es el mensaje de la Sala de lo penal del Tribunal Supremo al presidente Quim Torra. Los magistrados han acordado rechazar la admisión del recurso de casación presentado por el expresidente de la Generalitat contra la última sentencia que lo inhabilitaba y lo multaba por un delito de desobediencia. En concreto, sobre la resolución de la Audiencia de Barcelona, del 5 de mayo del 2023, que confirmó la condena a quince meses de inhabilitación y al pago de una multa de 24.000 euros por un delito de desobediencia.
El tribunal consideró probado que no cumplió el requerimiento que le hizo el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) septiembre del 2019 para retirar una pancarta a favor de presos políticos y exiliados de la fachada del Palau de la Generalitat. En una providencia, dictada este miércoles, la Sala destaca que el recurso no ha acreditado interés de casación que requiere el pronunciamiento. Por lo tanto, concluye que no se puede admitir el recurso. La resolución la firman el presidente de la sala, Manuel Marchena, el magistrado Juan Ramón Berdugo -que ahora tiene la causa del Tsunami Democrático- y la magistrada Susana Polo.

Segunda vez que llega al Supremo
Por otro lado, añade que la Audiencia de Barcelona, al confirmar la sentencia inicial de un Juzgado Penal de Barcelona, descartó ya la existencia de vulneración de derechos fundamentales alegada por la defensa del presidente, «sin que se aprecie irracionalidad o arbitrariedad en su decisión». La única vía que le queda al presidente es agotar la vía, del recurso de amparo, ante el Tribunal Constitucional, que también ha utilizado, y continuar su recorrido hacia la vía de la justicia europea, a través del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Torra fue condenado dos veces por hechos similares, como fue su negativa a retirar pancartas en solidaridad con los presos políticos y a favor y en defensa de la libertad de expresión. Fue precisamente el Tribunal Supremo quien confirmó su primera inhabilitación para mostrar estos símbolos durante una campaña electoral.