A menudo las cosas no son el que parecen, ni mucho menos, pero hay casos que la frase hecha procede con todos los sentidos. Es el caso de una clase magistral organizada por el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM), así como la influyente Agrupación Abogacía Joven de Madrid, el próximo 18 de septiembre en la sede de colegio profesional y también en línea. Es una formación sobre una de las cuestiones más delicadas del derecho penal: la responsabilidad penal de los familiares en la administración empresarial. En concreto, el curso lleva por título: «Delincuencia patrimonial entre parientes en el seno de la empresa».

La curiosidad, no obstante, es que el curso lo imparten Manuel Marchena Gómez, presidente de la sala de lo penal del Tribunal Supremo, y Manuel Marchena Perea, hijo del magistrado. Ambos coautores del libro Claves prácticas para la defensa penal, un manual interesantísimo para abordar el derecho procesal penal y los detalles de los delitos que recoge el Código Penal y sus modificaciones en los últimos dos años, editado también por los dos juristas. Un libro que ha tenido bastante éxito entre la alta judicatura y los despachos de abogados penalistas de Madrid.

El anuncio de la formación con los dos Marchena/AJAM
El anuncio de la formación con los dos Marchena/AJAM

Una excusa absolutoria

De hecho, la temática de la formación representa uno de los puntos más buscados y más cuestionados por la doctrina, la jurisprudencia y la práctica procesal habitual entre los despachos que llevan empresas familiares. En concreto, la razón de parentesco como motivo eximente de responsabilidad penal. Así, padre e hijo desgranarán la excusa absolutoria prevista al arte. 268 del Código Penal que exime de responsabilidad penal los familiares más próximos por los delitos patrimoniales que cometan entre sí, siempre que no haya concurrido violencia o intimidación ni sea la víctima una persona especialmente vulnerable por razón de la edad o para tratarse de una persona con discapacidad, quedando sujetes únicamente a la responsabilidad civil que pudiera derivarse del delito.

De hecho, AJA cree que esta figura ha generado «múltiples debates e interpretaciones, puesto que su alcance llega incluso a otras jurisdicciones, como la civil, al abordar su aplicación en el seno de sociedades compuestas por familiares». Bastante motivo para organizar un webinar con dos expertos del nivel de Manuel Marchena magistrado y su hijo abogado, que por ejemplo, acumula las absoluciones de los casos derivados por las actividades del Pequeño Nicolás.

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