Cuando faltan 48 horas para que la militancia de Esquerra Republicana elija en segunda vuelta quién será el próximo presidente del partido, el candidato de Militància Decidim, Oriol Junqueras, y el de Nova Esquerra Nacional, Xavier Godàs, han protagonizado un cara a cara en la sede nacional del partido, en la calle Calàbria. El debate ha comenzado lleno de discursos enlatados por parte de los dos candidatos a presidir el partido, pero poco a poco se ha ido animando. Ha habido algunos momentos de tensión entre ambos, pero Junqueras ha esquivado todos los intentos de Godàs de acorralarlo. El candidato de NEN ha intentado que Junqueras entrara en el cuerpo a cuerpo con cuestiones como el balance de gestión o la estructura B, pero no lo ha logrado.
El primer bloque ha estado marcado por discursos enlatados sobre los errores que han llevado a la formación republicana a la situación actual. Junqueras ha recordado que ERC ha sido capaz de lograr «grandes victorias» en elecciones europeas tanto en Cataluña como en España, pero ha reconocido que «hemos perdido contacto con buena parte de la militancia» y ha señalado que algunas cuestiones como, por ejemplo, las estructuras B «no nos han ayudado». Por su parte, Godàs ha recordado la labor que han llevado a cabo Junqueras, Rovira y el resto de líderes durante los últimos años, pero ha subrayado la necesidad de «cambio» en los liderazgos del partido. A pesar de los discursos, los dos candidatos se han enfrentado por el análisis que han hecho uno y otro del Primero de Octubre. Godàs ha reprochado que «no hubiera nada preparado como pista de aterrizaje», pero Junqueras le ha replicado que «había habido cosas muy preparadas» que permitieron el 1-O y el 3-O.
Después de un primer bloque sin mucha tensión, ambos han chocado en la estrategia que debe seguir el partido a partir de ahora. Godàs ha insistido en la necesidad de «hacer un cambio», y ha asegurado que el partido debe crecer, pero «no puede gustar a todos» y que debe hacerse grande hacia la «izquierda nacional» y no saltar hacia el PSC y hacia Junts. Junqueras lo ha interrumpido, provocando la aclaración del candidato de NEN. «Soy de clase trabajadora y milito en la izquierda siempre. A ver si os hacen una infografía que identifique esto», ha rematado, pero el candidato de Militància Decidim también ha replicado el discurso de su rival y le ha dicho que «la única manera de no ser muleta de nadie es ser muy grande».

Reproches por «ocultar» esteladas y por el informe de gestión
Sin embargo, Xavier Godàs ha intentado entrar en el cuerpo a cuerpo asegurando que en los últimos años el partido ha «ocultado las esteladas», una afirmación que Junqueras ha negado rotundamente. «¿Hay alguna incompatibilidad en trabajar en las fábricas y llevar una estelada?», ha preguntado Junqueras para afirmar que «siempre hemos llevado esteladas». El informe de gestión que no presentó Junqueras después de dejar la presidencia del partido ha sido otro de los elementos que Godàs ha puesto sobre la mesa. «Para respetar a la militancia deberías haber presentado el balance de gestión, y la mejor manera de respetar a la militancia es predicar con el ejemplo», ha apuntado, pero el candidato de Militància Decidim ha evitado responder y ha dicho que «la mejor manera de respetar a la militancia es dar un congreso, y ha esquivado la cuestión del informe». Entonces, Godàs lo ha vuelto a intentar, pero Oriol Junqueras ha recordado a la moderadora Neus Saltó que el candidato de NEN estaba «fuera de tiempo».
Entonces, Oriol Junqueras ha acusado a Godàs de no acercarse «a la realidad» y de ser muy pesimista, porque, según él, cuando viaja por toda Cataluña se encuentra con «mucha gente que tiene ilusión» y, en vez de discrepar, ha apostado por lanzar un mensaje de unidad: «Es por eso que ha pedido al candidato de Nova Esquerra Nacional trabajar conjuntamente «para que la militancia de este partido esté orgullosa». «Hagámoslo juntos», ha añadido. Godàs, por su parte, ha recogido el guante de Junqueras y le ha hecho una propuesta: si gana el congreso lo primero que hará es hablar con él porque «un activo como tú debe mantenerse activo en el partido».
Junqueras se mantiene al margen de la decisión de Barcelona y de la estructura B
Finalmente, Xavier Godàs ha asegurado que no quieren entrar a gobernar con el PSC, ni en el Govern ni en el Ayuntamiento de Barcelona, ha intentado que Oriol Junqueras se posicionara sobre si el grupo municipal de ERC debe entrar en el gobierno de Jaume Collboni, pero Junqueras se ha mantenido al margen subrayando que se trata de una decisión de «ámbito municipal», y ha recordado que en el Ayuntamiento de Manresa se pactó con el PSC. Y cuando le ha insistido, porque el «partido debe tener una estrategia», pero Junqueras ha dejado claro que el «reto» es hacer cumplir los acuerdos al PSC. «Yo no tuve prisa para llegar a un acuerdo de investidura tres semanas antes del límite», ha sentenciado.
La estructura B ha acabado de caldear el ambiente entre ambos. Godàs ha manifestado que no es comprensible que la persona que ha presidido el partido durante 13 años no tuviera conocimiento de estas malas prácticas del partido. «Soy responsable de todas las confianzas que he otorgado, pero no me siento responsable de ningún abuso de confianza que alguien haya podido cometer. Alguien tomó unas decisiones sobre unos carteles sobre el Alzheimer y unos mariachis, y es evidente que no fui yo», ha contestado Junqueras, quien ha recordado el grupo de signal Pa amb Tomàquet, que habría tomado el control de ERC. «Terminamos aquí el tercer bloque, donde se ha caldeado el ambiente a medida que ha avanzado el debate», ha apuntado la moderadora del debate antes de que los dos candidatos encararan su minuto final del debate para pedir el voto.