El independentismo se ha vuelto a unir de nuevo para criticar el tradicional discurso del rey español, Felipe VI. Un discurso con el que el monarca intentó esquivar referirse a Cataluña y envió un mensaje a los políticos de «serenidad» para «proteger la convivencia» de los españoles. El recientemente revalidado presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras, sin embargo, ha recriminado las palabras del Borbón, ya que ha querido dejar muy claro desde la tradicional ofrenda floral en la tumba del presidente Macià que Felipe VI no está legitimado para pedir serenidad a los políticos cuando él mismo avivó la confrontación después del 1-O. Junqueras, quien ha recordado que el Borbón se sienta en el trono «porque el dictador nombró rey a su padre», ha dicho que el 3 de octubre de 2017, durante su discurso después del referéndum, «aplaudía las palizas que la policía había dado a los votantes»: «Entendemos que el rey en ningún caso está habilitado para pedir que los demás hagan menos ruido cuando él ha contribuido más que nadie», ha aseverado.
Una idea muy similar a la que ha expresado el secretario general de Junts, Jordi Turull, el cual, aunque no ha querido entrar a hacer grandes valoraciones sobre las palabras de la noche de Navidad del monarca de los españoles, sí que le ha instado a pedir “disculpas” por el 3 de octubre. En esta línea, el dirigente de Junts también ha querido dejar claro que las palabras del monarca son «absolutamente irrelevantes» y ha querido dejar claro que el rey está «falto de cualquier credibilidad» por sus actuaciones como representante español.

Dardo envenenado a Salvador Illa
La nueva ejecutiva de ERC, encabezada por Junqueras y Elisenda Alamany, también ha aprovechado la oportunidad para lanzar un mensaje al presidente de la Generalitat, Salvador Illa. Aunque no lo han expresado de manera explícita, Junqueras ha pedido «honrar los acuerdos y pactos» a los que se ha llegado, en referencia a los acuerdos de legislatura que han permitido al dirigente socialista convertirse en el nuevo inquilino de Palau, y cuyo cumplimiento se ha convertido en uno de los grandes obstáculos en las negociaciones por los presupuestos del ejecutivo -unas conversaciones que, por el momento, se mantienen estancadas.
Por su parte, el líder de Junts ha asegurado que “Cataluña revivirá” a los “ilusos enterradores” que hablan de «pasar página» y que «dan por terminado el proceso de Cataluña por su plenitud, por su independencia». Unas palabras que responden directamente a la valoración que hizo Illa este lunes del primer tramo de su legislatura. «Mientras haya nación, aquí no se podrá pasar página», ha remachado.En esta línea, el presidente del Parlamento -y miembro de Junts-, Josep Rull, ha querido remarcar que Cataluña «no está en una situación de normalidad» porque tiene dos diputados de la cámara que «permanecen de manera infame e ignominiosa en el exilio», en referencia a Carles Puigdemont y Lluís Puig.