Este jueves se ha sellado definitivamente la reelección de Pedro Sánchez gracias a los votos a favor del independentismo, que ya se habían anunciado con los pactos a los cuales llegó Junts y ERC, independientemente, con el PSOE. Unos pactos y el inicio de legislatura que no se han visto con buenos ojos entre algunas formaciones independentistas. Este mismo jueves la CUP ha hecho un llamamiento a la movilización social después de investir el presidenciable socialista, y cargan contra los acuerdos de los juntaires y los republicanos porque consideran que «niegan el derecho de la autodeterminación».
Así lo ha hecho saber la diputada de la formación anticapitalista Laia Estrada en una concentración que ha tenido lugar este anochecer en la plaza de Urquinaona de Barcelona. Desde la CUP consideran que los acuerdos firmados abandonan la autodeterminación, puesto que someten la cuestión a pactar un referéndum por Cataluña con el Estado, cosa que supone «un cierre del ciclo de luchas» del pueblo catalán. Endureciendo el tono, Estrada acusa Junts y ERC de «consagrar el marco» del estado español «y renunciar al mandato del 1-O». «El acuerdo es papel mojado porque no hay ninguna posibilidad real de negociación con el Estado para ejercer el derecho en la autodeterminación», argumenta la diputada cupaire. En este sentido, Estrada considera que “no es cierto ni posible” un referéndum pactado por la autodeterminación por la vía de la negociación. “Están alimentando un engaño, porque esto solo es posible con la lucha popular fuera de las instituciones”, remacha.

Rearticular la izquierda independentista
Durante la concentración, que ha congregado cerca de unas cincuenta personas, diferentes miembros de organizaciones de la izquierda independentista han leído fragmentos del manifiesto ‘No al pacto de Estado’, y han pedido rearticular la izquierda independentista. «Hemos venido a romper con este estado y construir un país libre», sentencia el portavoz nacional de Adelante, Lluc Gayà. En ningún momento se han querido posicionar en contra de la amnistía, pero sí que recriminan el hecho que equipare «víctimas y verdugos: «Se liberará judicialmente y represivamente a algunas de las víctimas, a la vez que se eximirá de responsabilidad penal a los policías y aquellos quién elaboraron una operación de Estado”, aseveran, y añaden, siguiendo esta línea, que se usará para «desmovilizar» el movimiento independentista.




