El Partido Popular y Vox han creado nuevas alianzas para gobernar en los últimos meses, como por ejemplo en el País Valenciano, el Aragón o las Islas Baleares. En Los tres casos, los tres gobiernos han adoptado una clara línea de acción contra la lengua catalana, para intentar que pierda todo el peso posible dentro de su territorio. En cuanto al gobierno balear, en el cual Marga Prohens (PP) ocupa la presidencia y la extrema derecha controla el Parlamento, Vox será el encargado de controlar la libertad lingüística de las Baleares. Este mismo viernes han anunciado que la formación ultra se hará cargo de la gestión de la Oficina de Garantía de la Libertad Lingüística de las Baleares, una oficina que pretende reducir el uso del catalán en las islas.
Se trata de una medida que no sorprende del todo, puesto que tal como ha explicado la portavoz adjunta del Gobierno y consejera de Presidencia y administraciones públicas, Antònia Maria Estarellas, en una rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en el acuerdo que firmaron los ultras y los populares ya quedaba escrito que Vox se haría cargo de la gestión de esta oficina. «Esta Oficina es un acuerdo incluido en el pacto de investidura. No nos hemos escondido», señala. El objetivo de esta oficina es, según estipularon en el pacto, «garantizar la libertad de los ciudadanos a utilizar las dos lenguas cooficiales«, es decir, con otras palabras, que la gente deje de usar el catalán como lengua principal.

Definir las líneas de acción
En estos momentos la Oficina todavía no ha definido cuáles serán sus líneas de trabajo. Desde el gobierno balear aseguran que «despacio se irán definiendo dentro de las comisiones de trabajo, junto con Vox, como se articula esta Oficina, que dependerá del Parlamento». Un Parlamento donde la presidencia está a cargo de la extrema derecha, y las formaciones de gobierno tienen mayoría. «Solo sé que se tiene que acabar de definir como se hará esta Oficina, por lo tanto, desconozco hacia donde se tiene que articular, pero la creación de la Oficina es un pacto de investidura con Vox», concluye Estarellas.