Este miércoles por la mañana las negociaciones por la investidura, la amnistía y el papel del presidente al exilio, Carles Puigdemont, dentro de todo este entramado de conversaciones han aparecido de pleno dentro del debate de Ursula Von der Leyen sobre el estado de la Unión dentro del Parlamento Europeo. El independentismo pide a Europa que sean empáticos con el conflicto catalán y las negociaciones vigentes. Por un lado, el eurodiputado de Junts Toni Comín ha explicado a la presidenta de la Comisión Europea que el Estado español afronta en Cataluña la negociación “más trascendente y decisiva desde la transición”. De hecho, en este sentido, Comín ha comparado la situación actual con la Transición española hacia la democracia, y ha instado Europa a interpretarla del mismo modo que lo hicieron entonces. «Entonces Europa entendió que la negociación era determinando no solo por España, sino también por Europa, y por su futuro y estabilidad. Y ahora también lo es», comenta.
Comín ha querido dejar claro que si España sabe encontrar una solución basada “en los derechos de los hombres, la democracia, y los derechos internacionales civiles y políticos, es decir, el derecho a la autodeterminación, la solución será sólida y durable”. Es por eso que insta a la Comisión Europea a abordar la situación actual con una “actitud responsable y constructiva”. Por su parte, el eurodiputado de ERC, Jordi Solé, también ha entrado de pleno en las cuestiones que se abordan durante las negociaciones, y ha interpelado Von der Leyen diciendo que quiere poder dirigirse a ella en su “lengua materna, el catalán”. Unas afirmaciones que llegan después de que el Parlamento prorrogara el debate sobre la oficialidad del catalán adentro la Eurocámara para el pleno del próximo martes 19 de septiembre.

Reproches a Sánchez por la amnistía
Más allá de las palabras de los eurodiputados independentistas, la derecha española a Europa también ha centrado sus intervenciones en las negociaciones. En un contexto donde Pedro Sánchez es el actual presidente del consejo de la UE, el PP ha criticado severamente a los socialistas por mantener conversaciones sobre la amnistía con el independentismo. “Una amnistía supone negar la existencia de delitos y fulminar la separación de poderes. Es un ataque en el estado de derecho”, asegura la eurodiputada de los populares, Dolors Montserrat.
La eurodiputada lamenta que Sánchez todavía no haya presentado oficialmente cuáles son las líneas de trabajo por su mandato europeo, y atribuye el motivo de no haberlo hecho a las negociaciones por la gobernabilidad española. “No quiere que se vea en público lo que negocia en privado. No quiere coincidir con Puigdemont, un prófugo de la justicia que está aquí y le exige una amnistía. El precio de la derrota electoral de Sánchez no puede ser una humillación en España.”, espeta. Unas afirmaciones que desde el PSOE se han apresurado a responder. Iratxe García, cabeza de filas de los socialistas, ha respondido a Montserrat que “quien pone en peligro la unidad del país es quien avala o plantea una rebelión ciudadana contra los resultados democráticos”, refiriéndose a las declaraciones del expresidente español José María Aznar en las cuales anima a los ciudadanos a hacer un nuevo ‘¡Basta Ya!’, eslogan que se acuñó contra ETA, ahora por “hacer frente con toda la determinación” al independentismo.
Una línea de discurso muy similar a la que ha adoptado Ciutadans. Durante su intervención, el eurodiputado Adrián Vázquez ha pedido en la UE que “no mire hacia otra banda” porque el PSOE está planteando “la impunidad de los que atacaron el estado de derecho para mantenerse al poder”: «No hablo de Hungría ni Polonia, sino del país que ostenta la presidencia del Consejo. Escuchen el llamamiento de auxilio», asevera con firmeza.