El independentismo intenta marcar perfil ante un Pedro Sánchez crecido después de una primera sesión de investidura marcada por el cara a cara del presidente español con Alberto Núñez Feijóo y los avisos de ERC y Junts sobre la fragilidad de la mayoría parlamentaria del nuevo gobierno de coalición. Los portavoces de ERC, Gabriel Rufián, y de Junts, Míriam Nogueras, han vuelto a advertir a Sánchez justo antes de la segunda sesión del debate que tendrá que medir muy bien sus pasos si quiere que su programa de gobierno tenga recorrido. Con todo, la lucha de los partidos independentistas ahora mismo es más una demostración de fuerza teórica que práctica, puesto que, si no hay sorpresa de última hora, Sánchez será investido presidente en la primera votación, prevista para este mediodía.
Los republicanos confirmaron durante la sesión de este miércoles que votarían a favor y Nogueras ha asegurado esta mañana en RAC1 que también apoyarán a Sánchez a pesar del enfado por el discurso de investidura del líder socialista. “Votaremos que sí”, ha sentenciado la portavoz de Juntos en el Congreso nada más empezar la entrevista. Nogueras ha explicado que, en privado, los socialistas les dieron garantías del cumplimiento del acuerdo político firmado en Bruselas. “La negociación continúa”, ha añadido la diputada.

El independentismo buscar unirse contra el enemigo real
Gabrie Rufián, que poco antes había sido entrevistado en Catalunya Ràdio, ha recordado que los republicanos están en “quinto de PSOE” y que dan por hecho que los socialistas intentarán llevar las negociaciones a su terreno para rebajar el contenido de todas las promesas que les han arrancado. “Cuando el PSOE te pasa un documento, lo tienes que revisar incluso a contraluz”, ha dicho Rufián en tono irónico. El portavoz republicano también ha confiado que ERC y Junts serán capaces de entenderse apretar a Sánchez y al PSOE. “Tengo la sensación que con la entrada de Junts a la ecuación de la negociación, todo dejará de ser culpa de ERC y a partir de ahora será del PSOE”, ha espetado.
Tanto Rufián como Nogueras han mostrado una vez más la división que todavía existe entre las dos formaciones y han reivindicado la soledad de cada partido en la hora de defender sus posicionamientos. “Dos no se coordinan si uno no quiere”, ha afirmado el portavoz de ERC. Los republicanos lamentan que se han pasado cuatro años batallando con el PSOE en Madrid para establecer las bases negociadoras que han permitido llegar a la ley de amnistía, mientras que desde Junts reconocen que les habría gustado tener más acompañamiento para defender la vigencia del 1-O y la soberanía del Parlamento de Cataluña frente a las injerencias de la justicia española.

Una legislatura frágil
Nogueras ha vuelto a avisar a Sánchez que la legislatura “durará lo que dure la palabra de Sánchez” y que mientras el gobierno español cumpla los acuerdos, Junts votará a favor de sus iniciativas legislativas. Desde Junts consideran que hasta ahora el PSOE ha cumplido con sus exigencias —catalán en el Congreso, iniciar los trámites por la oficialidad del catalán en la UE, sacar el independentismo de la lista antiterrorista de la Europol y la ley de amnistía— y confían que la primera reunión de la mesa de negociación, que tendrá lugar este noviembre, será un buen termómetro del recorrido que tendrán las conversaciones con los socialistas.