El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, se enfrenta desde esta mañana a la primera prueba de fuego para defender el nuevo modelo de financiación para Cataluña pactado con Esquerra Republicana -el cual lo ha convertido en presidente- ante el resto de líderes autonómicos. Una conferencia donde el jefe del ejecutivo catalán ya ha lanzado una advertencia hacia los populares, los principales detractores de la financiación singular, y les ha dejado claro que no aceptará «lecciones de solidaridad». El PP, sin embargo, ha respondido a la advertencia de Illa con un ataque directo contra el presidente del gobierno español -y aliado de Salvador Illa en la Moncloa-, Pedro Sánchez. Los populares lo acusan de priorizar los «privilegios» para los catalanes y dejar de lado al resto de comunidades autónomas: «Ha llegado con carpetas vacías y folios en blanco», ha espetado la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, quien considera que Sánchez es «rehén» de sus socios.
En esta misma línea se ha expresado la presidenta cántabra, la popular María José Sáenz de Buruaga, que este año actúa como anfitriona de la Conferencia de Presidentes. Sáenz de Buruaga ha reclamado a su homólogo del gobierno español que «paralice el boletín separatista y que frene, que corte de raíz, cualquier avance hacia la independencia fiscal de Cataluña». La líder cántabra cree que se puede lograr un acuerdo «de mínimos», eso sí, «si se regresa a la senda del respeto constitucional»: «Creo honestamente posible lograr un acuerdo de mínimos si se regresa a la senda del respeto constitucional y de los principios básicos vertebradores del sistema», ha expresado la también líder del PP regional, según apuntan fuentes gubernamentales a Europa Press. Los dirigentes populares consideran que el nuevo modelo de financiación acordado en Cataluña va en contra de la «solidaridad» y de la «igualdad» entre comunidades: «No aceptamos la bilateralidad ni la ruptura de la solidaridad y la igualdad», ha defendido dentro de la reunión el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda.
Críticas sobre la financiación, también dentro del PSOE
Los líderes populares han sido los encargados de liderar los ataques contra Sánchez e Illa por el nuevo modelo de financiación acordado con los republicanos en Cataluña. Las voces discordantes contra la financiación singular, sin embargo, también nacen dentro del mismo PSOE. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha reclamado durante la reunión al presidente del gobierno español que presente en un plazo de tres meses un borrador del nuevo sistema de financiación. De hecho, el dirigente socialista ha recordado a Sánchez que a pesar de la discusión que ha generado la posible reforma, el acuerdo con ERC para la financiación singular y la ronda de reuniones de Sánchez con los presidentes autonómicos en la Moncloa, hasta ahora no existe ningún documento que plasme las intenciones del ejecutivo.
