A las puertas de empezar la campaña para las elecciones al Parlament de Catalunya del 12-M, Pedro Sánchez ha sacudido este miércoles los comicios con su anuncio de parar su agenda pública hasta lunes y reflexionar si tiene que continuar al frente de la presidencia del Gobierno español. La gota que ha colmado el vaso ha sido la denuncia que el pseudosindicato de ultraderecha, Manos Limpias, ha presentado contra su mujer, Begoña Gómez, por los presuntos delitos de corrupción y tráfico de influencias. En clave catalana, con este comunicado, Sánchez puede estar buscando un plebiscito en torno a su persona en un intento de que Salvador Illa consiga unos resultados suficientes amplios que le permitan conseguir la presidencia de la Generalitat. Una vez más, la política catalana se ve zarandeada, y de qué manera, desde Madrid.
Ya con la convocatoria anticipada de las elecciones españolas del pasado 23 de julio, Sánchez se la jugó y, en aquella ocasión, la jugada le salió redonda. A pesar de perder en las urnas ante el PP de Alberto Núñez Feijóo, pudo repetir como presidente del Gobierno español después de cerrar un pacto con Junts y ERC, entre otros partidos, y acordar una ley de amnistía que ha convertido el conflicto entre PSOE y PP en una guerra abierta donde todo se vale. Según ha podido saber El Món, hasta el punto que fuentes del PP han hecho llegar a algunos medios afines, este miércoles, algunas valoraciones sobre el caso de la mujer de Sánchez donde sostienen «que el departamento de comunicación del gobierno español ya da cobertura también a la pareja de Pedro Sánchez y no solo al presidente del Gobierno» y «Sánchez pretende poner a la Abogacía del Estado a disposición de su mujer». Guerra sucia en mayúsculas.
Los socialistas cierran filas
“Necesito parar y reflexionar. Me urge responderme a la pregunta de si merece la pena, a pesar del barro en el que la derecha y la ultraderecha pretenden convertir la política. Si tengo que continuar al frente del Gobierno o renunciar a este alto honor”, ha escrito el presidente del Gobierno español en una carta publicada a la red X. Las primeras reacciones del anuncio de Sánchez no han tardado a aparecer. Como no podía ser de otro modo, los socialistas han cerrado filas con Sánchez. Salvador Illa, candidato a la presidencia de la Generalitat, ha sido muy explícito: «Todos los socialistas estamos contigo, Sánchez Castejón». También los ministros Luis Planas (Agricultura), Pilar Alegría (Educación), Elma Saiz (Seguridad Social) o Teresa Ribera (Transición Ecológica) han mostrado su apoyo al secretario general del PSOE. “Eres un gran presidente. Begoña y tú, sois grandes personas. Un fuerte abrazo”, ha escrito Planas. El apoyo a Sánchez ha llegado también de Sumar. La vicepresidenta Yolanda Díaz ha cargado contra la derecha. «No puede salirse con la suya. Hay que defender la democracia, el bloque progresista y la legitimidad del Gobierno de coalición, que tanto ha mejorado la vida de la gente».
¿Vendrá Sánchez al acto de inicio de campaña?
Sánchez ha suspendido todos los actos de su agenda. La duda es saber si esto implica solo su agenda como presidente del Gobierno español o también la que tiene como jefe de filas del PSOE. Sánchez tendría que estar el jueves en el acto de inicio de campaña de Illa en Sabadell, pero lo más probable es que no haga acto de presencia. Fuentes del PSC han subrayado que expresan «respeto» por la decisión de Sánchez y han concretado que el primer secretario y candidato del PSC hará una primera valoración, el jueves, a las 09.00 de la mañana, en un acto en Nueva Economía Fórum. Los socialistas también han querido dejar claro que no suspenden la campaña electoral.
Cara a cara de Illa y Puigdemont
El anuncio de Sánchez tendrá un efecto muy directo en la campaña de los partidos independentistas. Perfectamente, esta campaña se puede convertir en un cara a cara entre Illa -como
La reacción de Puigdemont
Puigdemont ha hecho una larga reflexión y ve motivos tácticos en el anuncio de Sánchez. «Desconozco cuáles son las razones profundas que mueven a Pedro Sánchez a abrir un periodo de reflexión sobre si merece la pena continuar o no, pero a menudo acostumbra a hacer movimientos tácticos que nadie se espera. En todo caso, es una decisión poco habitual en un dirigente político de su experiencia. Alguien que se define a través de un libro que se titula Manual de resistencia y que es conocido por su capacidad de resiliencia, no parece que tenga que ser demasiado vulnerable a las críticas que recibe«, ha escrito el presidente en el exilio. Y aconseja a Sánchez que se someta a una cuestión de confianza si realmente su anuncio es por la presión de la derecha y el acoso a su familia. Probablemente, esta será la decisión que tomará el presidente español y buscará reforzarse en el cargo con el voto favorable de todos los partidos que lo invistieron presidente. Puigdemont concluye con una advertencia: “Quién quiera convertir las elecciones catalanas en un flotador del PSOE se equivoca mucho” y sostiene que “ahora más que nunca hay que ser firmes ante Madrid y sus crisis políticas inacabables, porque lo que realmente está en juego es el futuro político de Cataluña, no el de un partido ni el de un primer ministro”.
El PP lo acusa de hacerse la víctima
Por otro lado, el candidato del PP a las elecciones de la Generalitat, Alejandro Fernández, ha acusado a Sánchez de querer hacerse la víctima en un mensaje en la red X. «Pretende hacernos pena, y, efectivamente, hace pena». Desde Génova, donde está la sede estatal del PP, la secretaría general de los populares, Cuca Gamarra, ha continuado con el mismo discurso que Fernández. «Denunciamos que el presidente del Gobierno apueste por la victimización y la lástima en lugar de por la rendición de cuentas y la claridad». Y ha añadido que Sánchez, en lugar de desaparecer cinco días, tendría que comparecer «urgentemente para dar una explicación razonada de los escándalos que rodean a su partido, a su Gobierno y a su pareja», Begoña Gómez. Después de quedarse fuera de la Moncloa, los populares han puesto la directa en un intento de echar Sánchez del mapa político. El siguiente capítulo quedará visto para sentencia el 12-M.