Juan Carlos de Borbón vuelve a estar en Galicia, un viaje que deseaba con muchas ganas y que no ha tenido tanta repercusión como las anteriores veces. Esto no quiere decir que los fotógrafos hayan ignorado su presencia en España, por eso. El trabajo de los
El padre de Felipe VI ha hecho caso omiso a sus indicaciones y ha viajado desde Abu Dabi aunque sepa que cada visita hace algo más de daño a la imagen de la familia real. Esto le importa un pepino, por lo que se ve, teniendo en cuenta que nada parece tan importante para él como lo son las regatas y el mar. El objetivo de su viaje es este, precisamente, navegar y reencontrarse con los pocos amigos que le continúan riendo las gracias como si nada hubiera pasado.
Juan Carlos de Borbón, empeorado físicamente en el retorno a España
Lo que más llama la atención de estas imágenes, como decíamos, es el estado físico del emérito. El Borbón aparece visiblemente más envejecido, mucho más delgado, ligeramente encorvado y con la necesidad de ser ayudado para andar, para entrar y para salir del barco.


No ha concedido ninguna declaración a los medios de comunicación congregados, un silencio que se sobreentiende teniendo en cuenta que no gustaría que hablara. De momento, solo se sabe que ha disfrutado de buen marisco con los amigos en un restaurante muy bueno de la zona de Sanxenxo.


Hay que recordar que Juan Carlos, de 85 años, ha sido operado más de 15 veces, la gran mayoría de ellas precisamente por culpa de los problemas de cadera y movilidad que arrastra. De momento no se ha filtrado a la prensa si tiene alguna molestia nueva o no, pero hay veces en que las imágenes hablan por sí solas.