Este miércoles por la tarde ha empezado la batalla política por la amnistía en el Parlamento Europeo. El debate, que ha durado prácticamente dos horas, ha contado con 38 intervenciones diferentes donde se han podido sentir voces partidarias a la amnistía y otras, con un tono más agresivo que ha generado mucha tensión dentro de la sala, contrarias a la desjudicialización. Ha estado marcado por los reproches entre las diferentes formaciones, con los grupos impulsores de la discusión -el Partido Popular Europeo, Renew, ECR y I+D- cargando duramente contra las acciones de Pedro Sánchez, y el resto de formaciones acusando precisamente la derecha de poner en peligro el estado de derecho en España por sus actuaciones del estado a lo largo de los últimos años.
La sesión ha sido marcada por un tono acalorado en la mayor parte de las intervenciones. De hecho, algunos dirigentes portugueses socialistas han reconocido sentirse «ofendidos» por las referencias que ha hecho el presidente de los populares europeos, el alemán Manfred Weber, a la dimisión del ya ex primer ministro de Portugal, Antonio Costa, investigado por un caso de malversación y corrupción. A pesar de que ha arrancado con un tono pausado y políticamente correcto, la crispación de los eurodiputados ha ido creciendo exponencialmente a medida que pasaban las intervenciones. Un claro ejemplo de esta tensión ha sido el socialista Juan Fernando López Aguilar, que desde el atril ha defendido su posición prácticamente a gritos. Un tono poco habitual en un debate parlamentario.
La prudencia de Reynders
Para empezar, la Comisión Europea (CE) ha garantizado que hará un análisis exhaustivo, «de forma independiente y objetiva» de la ley de amnistía. Así lo ha asegurado el consejero de Justicia, Didier Reynders, durante su intervención en el debate que ha forzado el PP al hemiciclo de Estrasburgo para abordar la ley de amnistía que ha pactado el independentismo con el nuevo presidente del gobierno español, Pedro Sánchez. Reynders ha dejado claro que seguirá “muy de cerca” la situación ante las preocupaciones expresadas por algunas formaciones sobre esta cuestión y las comisiones pactadas con el independentismo, pero que la Comisión mantiene que el conflicto entre el Estado y Cataluña es un asunto «interno», por lo cual se tiene que regir según su orden constitucional.
En este sentido, la secretaría de Estado de Asuntos exteriores y Globales y representante del gobierno español, Ángeles Moreno, que hablaba en nombre de la presidencia de turno del Consejo, ha advertido que “no contribuye a mejorar la democracia europea” hacer un debate sobre una normativa que es competencia “interna” de España. Moreno considera que tratar la amnistía en el Parlamento Europeo es «perjudicial» para la Unión, puesto que ejemplifica las «tendencias preocupantes» de Europa. Siguiendo en esta línea, la representante del ejecutivo español lamenta que durante el debate se equipare la ley de amnistía que se está tramitando en España para desjudicializar el Procés con iniciativas otros países, refiriéndose en Polonia y Hungría, puesto que considera que no son políticas que se puedan equiparar.

Las intervenciones del independentismo
Junts y ERC, en sus intervenciones, han reprochado al Partido Popular su deriva «trumpista» y los han querido dejar claro que la ley que se está tramitando no es una «anomalía». De hecho, han recordado las diversas amnistías que se han producido a lo largo de la historia, a pesar de que la índole de estas era diferente. Entre las acusaciones de «traición» hacia Sánchez por parte de los europarlamentarios de la extrema derecha española y los reproches de los populares, el eurodiputado de Junts, Toni Comín, ha apelado directamente a Weber, a quien ha recordado que los jueces de Schleswig-Holstein rechazaron la extradición del presidente al exilio, Carles Puigdemont.
A su vez, el eurodiputado de ERC, Jordi Solé, se ha dirigido a Reynders, diciéndole que puede estar «tranquilo» por el hecho que la ley de amnistía «no va en contra de la Constitución española ni en contra de la Unión Europea». «Intenta reparar […] la represión contra un movimiento vivo y democrático como el independentismo», espeta. Solé también ha querido referirse a las manifestaciones que se han celebrado a Ferraz durante las últimas semanas donde se ha exhibido simbología nazi y franquista. En este sentido, el eurodiputado republicano ha dicho que la Comisión tendría que centrarse más en estas cuestiones y no tanto en la amnistía.

Los reproches del PP y Vox contra la amnistía
Una de las intervenciones más esperadas era la del presidente de los populares europeos, Manfred Weber, quienes en el inicio de su intervención -como ha venido exponiendo durante los últimos días- ha leído textualmente la carta del pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en que los jueces expresaban su preocupación por la ley de amnistía. «Cuando la corrupción y los violentos no son perseguidos, el estado de derecho está en peligro», ha afirmado.
Mientras que las voces socialistas, como la de Javi López, apoyan a la norma española pactada con el independentismo, el italiano conservador Niccola Procaccini o el popular rumano Siegried Muresan, consideran que la ley de amnistía es un ataque contra el estado de derecho, y que, por lo tanto, no se puede permitir. «He visto a miles de personas en las calles, como a Polonia. ¿Por qué? Porque el estado de derecho es universal y un pilar de la democracia a Europa», espeta el eurodiputado polaco, del grupo de los populares, Andrzej Halicki, cargando contra la posición de los socialistas. De hecho, en esta misma línea, el eurodiputado de Ciudadanos Jordi Cañas ha dicho que el presidente español solo ha aceptado la amnistía por un interés personal: «Por siete votos, Sánchez ataca el estado de derecho de esta unión«, ha aseverado.
El PP ha seguido la misma línea de discurso que Ciudadanos, pero ha sido Vox quien ha subido todavía más el tono refiriéndose a la amnistía como un «golpe de estado». «Los españoles quieren una respuesta clara y concisa, porque ven como España va camino de convertirse en una tiranía; ningún europeo decente entenderá que la Comisión Europea aplique una doble vara de medidas con Polonia y Hungría, cuando la situación en España es más grave», ha remachado el eurodiputado de la extrema derecha española, Jorge Buxadé.
La respuesta socialista
Por su parte, las voces partidarias a la amnistía consideran que las reacciones y los reproches de la derecha y la extrema derecha europea, afina al PP y Vox, no son más que una muestra de la derrota a raíz de las elecciones del 23-J. «Cómo pueden afirmar que la Constitución está en peligro cuando han estado violando desde hace cinco años la renovación del Consejo General del Poder Judicial?», ha preguntado la presidenta de la formación socialista en la Eurocámara, Iratxe García. La eurodiputada acusa la derecha de «mentir» cuando aseguran que la amnistía incluirá los delitos de terrorismo. Unas afirmaciones que se han repetido varias veces a lo largo del debate.