Nuevo día de incidencias y retrasos en Rodalies. La operadora ferroviaria del servicio, Renfe, ha anunciado «retrasos generalizados» y cancelaciones de trenes en las líneas R2 sur y R4 -las que conectan el Camp de Tarragona- debido a la «conflictividad laboral»: «Desde primera hora de la mañana de este sábado, las líneas R2 sur y R4 están sufriendo retrasos generalizados y frecuencias de paso alteradas por un conflicto con el sindicato de maquinistas», ha reconocido Renfe. Este sábado, hasta las ocho de la tarde, la operadora ferroviaria ha detallado que se han suprimido 106 trenes previstos y se han producido demoras de media hora en las dos líneas. Además, también se ha suprimido el refuerzo de trenes previsto para este sábado por la noche entre Sitges y la capital catalana, el cual se había de llevar a cabo para cubrir el elevado volumen de gente que se desplazará hasta el municipio del Garraf para celebrar el carnaval.
Desde Renfe recuerdan que estos retrasos se deben al conflicto con las organizaciones sindicales del sector, que ya han anunciado nuevas movilizaciones contra el traspaso de Rodalies: «Esta situación también afecta la provisión de trenes a talleres y tendrá repercusiones en la programación del servicio en días laborables, sobre las cuales Renfe informará en las próximas horas», apuntan desde la operadora ferroviaria a través de un comunicado, en el cual también han anunciado que no tienen capacidad para asumir el refuerzo del servicio en estas dos líneas que conectan el Camp de Tarragona por la celebración de carnavales: «Además, debido a esta situación laboral, se ha tenido que suspender el refuerzo programado entre Sitges y Barcelona para esta noche de Carnestoltes», puntualizan desde la operadora ferroviaria.
📢#ATENCIÓ!
— Rodalies Catalunya (@rodalies) March 1, 2025
🔴 El servei de Rodalies està patint retards i supressions puntuals de trens a les línies R2 Sud, R4 i Regionals del sud per conflictivitat laboral. S’està treballant per minimitzar les afectacions.
Un pulso entre sindicatos y Renfe
La puesta en marcha del traspaso de Rodalies, que de momento ha comenzado por el cambio de gobernanza de un tramo del R1, ha sido el detonante que ha reavivado el conflicto entre las organizaciones sindicales del sector y la operadora ferroviaria. A mediados de febrero, los comités generales de empresa de Renfe y Adif ya pusieron sobre la mesa la posibilidad de volver a movilizarse contra el traspaso, ya que alegan que no se han cumplido los acuerdos pactados para desconvocar la huelga de 2023. A través de un comunicado conjunto, los comités de empresa ya advirtieron que el traspaso de un primer tramo de la línea del Maresme y la decisión de descatalogarla de la red ferroviaria de interés general -una decisión también bastante criticada por los expertos- contravenían la garantía de integridad de los grupos de Adif y Renfe «manteniendo sus plantillas y su operación».
Por su parte, el sindicato español de maquinistas ferroviarios (Semaf) aseguran que los retrasos de esta jornada se han producido por un «error de coordinación entre la Generalitat, Renfe y Adif». A través de un comunicado, la organización sindical ha asegurado que las autoridades no han corregido el problema a pesar de que lo conocían «con más de 24 horas de antelación» y que han establecido un cuadrante de turnos de trabajo «ilegal» que «incumplía varios puntos de la normativa vigente». En esta línea, el sindicato ha desmentido los argumentos de Renfe que atribuyen los retrasos a la «conflictividad laboral» y ha endurecido el tono, ya que consideran que los problemas son responsabilidad de las empresas ferroviarias y la Generalitat. Concretamente, los acusan de haber incumplido con los horarios pactados.