La nueva consejera del Interior, Nuria Parlon, ha visitado los mandos del cuerpo al Complejo Central y ha fijado las prioridades de esta nueva etapa de los Mossos d’Esquadra. La exalcaldesa de Santa Coloma de Gramenet ha pedido combatir el «uso de armas blancas y la pequeña delincuencia». Acompañada del nuevo director del cuerpo, Josep Lluís Trapero, y el comisario en jefe Miquel Esquius, Parlon también ha pedido «contundencia» contra las «agresiones sexuales» y las «ocupaciones ilegales» que causen «problemas de convivencia». De esta forma, la nueva encargada de Interior en el gobierno de Salvador Illa fija los elementos troncales que marcarán la nueva legislatura en el cuerpo de Mossos d’Esquadra.
Salvador Illa anunció a Nuria Parlon en medio de la campaña electoral, buscando un golpe de efecto electoral con el anuncio de una alcaldesa que ha hecho de la seguridad el eje central de sus mandatos en Santa Coloma. La ahora responsable de Interior ha reconocido, en la reunión de este miércoles, que tiene una visión «contaminada» –»en el buen sentido», ha puntualizado– del trabajo que hacen las policías locales, sobre quienes ya ha mostrado su admiración en anteriores ocasiones y que toma de ejemplo en algunos asuntos. En este sentido, Parlon ha pedido a los Mossos respuestas «efectivas y ajustadas a la realidad del territorio».
En clave interna, Parlon también ha avisado a los mandos que es «fundamental» identificar los aspectos del cuerpo «que funcionan bien», pero sobre todo «aquellos que no, para poder hacer los cambios necesarios». Una declaración que llega después de semanas de tensión dentro del cuerpo, en el punto de mira después del operativo fallado para detener a Carles Puigdemont en su retorno del exilio. A pesar de todo, Parlon ha destacado que las Juntas de Seguridad avalan que Cataluña tiene «datos seguros».
Trapero se estrena como director del cuerpo
En este encuentro también ha intervenido Josep Lluís Trapero, que cambia el uniforme policial por la americana. El nuevo director ha pedido a los mandos un «liderazgo firme» para combatir «los graves problemas de delincuencia» que tiene Cataluña, expresión que ha utilizado para describir cuestiones como la multirreincidencia, el crimen organizado, los delitos sexuales y las ocupaciones. Trapero también ha pedido estar «alineados» con la nueva línea que ha marcado el gobierno de Salvador Illa: «Mejorar la seguridad y su percepción».
Trapero ha intervenido bajo la mirada del nuevo comisario en jefe de los Mossos, Miquel Esquius. Su designación supone «el retorno de la vieja guardia«, según la opinión de algunos mandos consultados por El Món en agosto pasado. El comisario Esquius ya comandó el cuerpo entre 10 de julio del 2018 y el 3 de junio del 2019, con Miquel Buch de consejero de Interior, una vez la Generalitat volvió en manos soberanistas después del 155.
