Las lluvias de primavera han dado una «tregua» al riesgo de incendios en la demarcación de Lleida. Unas lluvias que, además de contribuir en la prevención de riesgos, también han permitido recuperar mínimamente los embalses y destensar el estante de emergencia por sequía. Ahora bien, la lluvia es una arma de doble corte, puesto que también ha propiciado el crecimiento de vegetación, la cual «favorecerá más la conducción» de un posible incendio forestal, según ha explicado el jefe de la Región de Emergencia en Lleida, Joan Josep Bellostas, después de la reunión de coordinación de esta campaña forestal entre los cuerpos de emergencias implicados que se ha celebrado este viernes por la mañana en Lleida. Es decir, que las últimas lluvias han permitido remojar el territorio y evitar nuevos incendios, pero también han contribuido en el hecho que, en el momento que se produzca uno, el riesgo de extender sea mayor.

La demarcación leridana, una de las más castigadas por los fuegos estivales, afronta de nuevo una campaña «complicada» marcada por la «sequía estructural» que vive Cataluña. La campaña forestal ha empezado a desplegarse despacio por el territorio en función de las condiciones medioambientales. En la parte norte de la demarcación, la campaña forestal se ha atrasado hasta ahora, que apenas empieza, a causa de las lluvias que han caído durado la primavera. En cambio, en las comarcas del sur de Poniente, como por ejemplo Segrià, las Garrigues y el sur del Urgell y de la Segarra, se encuentran ya inmersas de pleno en la campaña, que coincide con la de la siega.

Dos bomberos a punto de subir a un helicóptero del GRAE / ACN

Reforzar el personal durante la campaña forestal

Para hacer frente a los futuros posibles incendios, el cuerpo de Bomberos de la Generalitat ha reforzado su personal a la demarcación de Lleida con 59 personas, que se incorporan a los 742 bomberos que hay en la zona -363 bomberos funcionarios y 379 voluntarios. Ahora, pues, a todo este personal también se suman 59 profesionales, la mayoría de los cuales son ayudantes de oficio forestal (AOF). También se han incorporado 4 técnicos especialistas operadores de Control, 6 conductores y 1 persona para el Equipo de Prevención Activa Forestal (EPAF) de Tremp. Este nuevo personal se pone en marcha para cubrir la campaña forestal, pero hay que recordar, tal como ha hecho este mismo viernes el jefe de los Agentes Rurales en Lleida, Llorenç Ricou, que la mayor parte de los fuegos que se produjeron el 2023 fueron fuera de temporada.

Concretamente, el año pasado se registraron a la demarcación 45 incendios forestales, mientras que durante la campaña de verano hubo «solo» 12, en los cuales se quemaron 1,68 hectáreas forestales, una cifra «que no se había visto nunca a pesar de que la campaña pintaba muy mal», asevera el jefe de los Agentes Rurales de la demarcación.

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