El sector de la salud vive inmerso en su propia crisis lingüística. La situación del catalán en este ámbito se ha convertido en un problema «estructural», sobre todo en lo que respecta al conocimiento y uso del idioma por parte de los profesionales sanitarios. Así lo reconoce el consejero de Política Lingüística de la Generalitat, Francesc Xavier Vila, quien considera que se deben tomar cartas en el asunto de manera urgente aplicando medidas como una revisión de los criterios de acceso a las facultades o una ampliación de los cursos formativos que se ofrecen a los profesionales. Todo con el objetivo de crear un grueso del personal sanitario que sepa catalán desde un principio.
«Debemos encontrar una solución estructural a un problema que ahora mismo es estructural […] No es solo resolver el tema de los que vengan a última hora, es que de partida debemos ser capaces de hacer que los que ya formamos nosotros, todos, salgan con el C1 bajo el brazo«, señala Vila en una entrevista a la ACN. El consejero remarca que la posición del catalán en este campo concreto es «importantísima» y que, por tanto, hay que dedicar todos los esfuerzos para conseguir tener más personal sanitario con el conocimiento básico de la lengua. Más allá del debate con los médicos que provienen de fuera del país, Vila considera que se debe poner la mirada en los facultativos que se forman aquí: «lo que tiene poco sentido es que los nuestros, los médicos que formamos aquí, no terminen sabiendo catalán. Deberían saberlo todos«.
Esta ampliación del conocimiento de catalán en el sector también requiere incrementar mucho la formación en competencia lingüística de todos los profesionales que trabajan en el sistema sanitario público, concertado y privado. Unos estudios que deben ser «prioritarios» y que deben ubicarse adecuadamente para que no supongan una sobrecarga de un sistema de salud que ya está bastante bajo presión. En esta línea, el Departamento de Salud ha puesto en marcha la segunda edición del Programa ‘Prescriu-te el català’, con un millar de plazas. El año pasado se ofrecieron 2.700 plazas iniciales, que se vieron desbordadas por una demanda superior a los 3.930 inscritos. Con todo, solo 1.352 participantes completaron con éxito los cursos.
Descalabro del uso social del catalán
Cabe recordar que estas declaraciones se producen justo después de la publicación de los resultados fatídicos de la Encuesta de Usos Lingüísticos de la Población del año 2023, realizada entre el Departamento de Política Lingüística y el IDESCAT, donde se concluye que una tercera parte de los catalanes tiene el catalán como lengua habitual, retrocediendo de esta manera hasta tres puntos y medio respecto a las cifras del año 2018.