Tarde complicada en las carreteras catalanas. Un fuerte episodio de granizo ha roto con todas las predicciones meteorológicas, obligando a cortar la autopista AP-7 y tiñendo de blanco varias comarcas del territorio catalán. Este fenómeno ha tenido lugar pocos minutos después de las cinco de la tarde, justo después de que se produjera un accidente de tráfico en la misma AP-7 a la altura de Sant Celoni que ya había obligado a cortar esta vía en sentido norte.
La intensa precipitación ha impedido la circulación de vehículos en ambos sentidos entre Llinars del Vallès y Sant Celoni (Vallès Oriental), provocando la acumulación de vehículos en la C-35, que discurre paralela a la AP-7, especialmente entre Llinars y Santa Maria de Palautordera. Según ha informado el Servicio Catalán de Tráfico, también se ha interrumpido la circulación a la C-25, el Eix Transversal. En un primer momento, el corte se ha producido entre Espinelves y Sant Julià de Vilatorta (Osona), pero más tarde se ha extendido desde Folgueroles (Osona) en Santa Coloma de Farners (Selva), un tramo de 34 kilómetros. Tanto en la AP-7 como la C-25 se han activado máquinas quitanieves para limpiar la calzada.
En este sentido, más allá de las afectaciones viarias, esta fuerte granizada ha calado eb varios puntos de Cataluña e incluso ha dejado nieve en puntos del Montseny, como Santa Fe. De hecho, varios usuarios han difundido a través de las redes sociales como el granizo ha cubierto calles del Maresme, del Vallès, de Osona y de la Selva de color blanco.
Un fenómeno que no salía en las predicciones
Por su parte, hay que precisar que el Servicio Meteorológico de Cataluña no había emitido ninguna alerta por tiempo violento, sino que informaba que la precipitación de este sábado sería «de intensidad débil, localmente moderada y puntualmente acompañada de tormenta y de granizo o piedra blanda». «Las cantidades de precipitación serán exiguas o localmente poco abundantes», decía la previsión publicada en su web. Tampoco la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) no había difundido ningún aviso por posibles granizadas. Todo esto ha contribuido al colapso de las carreteras catalanas, donde muchas personas se han visto sorprendidas por el fenómeno.
