La presidenta del Parlamento, Anna Erra, ha celebrado su primera reunión institucional con el presidente de la Generalitat al exilio, Carles Puigdemont, este maté domingo al Waterloo. El encuentro, a la que también han participado la presidenta de Junts, Laura Borràs, y el secretario general Jordi Turull, ha servido para «analizar la situación política catalana y preparar los retos» que tendrá que asumir Cataluña en las semanas próximas, como la sentencia del TGUE sobre el presidente Puigdemont, las elecciones españolas y la presidencia española de la UE.

Erra defiende la soberanía del Parlamento
Durante su discurso como nueva presidenta de la cámara catalana exigió los diputados de la cámara defender la «dignidad y la independencia del Parlamento». Entre aplausos a las filas independentistas, Erra ha asegurado que defenderá la soberanía de la cámara catalana, pero ha pedido no hacerlo suela. También se comprometió a respetar la pluralidad y cortar de pura cepa el fascismo y evitar que sea un espacio que sea partidista.
Recuerdo a Forcadell y Borràs
Erra en su discurso también recordó las expresidentas de la cámara Carme Forcadell y Laura Borràs. En este contexto, la nueva presidenta del Parlamento subrayaba «que hay un conflicto político» y por eso ha reclamado esfuerzos para “normalizar el país políticamente”. También envió un mensaje a los exiliados, asegurando que no es «normal ni justo». “Los derechos políticos tienen que ser sagrados y respetados”, exigió el pasado viernes.
Erra ha estado durante ocho años alcaldesa de Vic y ya hacía meses que sonaba como sustituta de Borràs para ocupar la presidencia del Parlamento. De hecho, todavía es alcaldesa en funciones, pero como que no se presentó para la reelección estará libre a partir del el próximo sábado.