El movimiento independentista se encuentra inmerso en un profundo cambio, un nuevo futuro para el independentismo que está condicionando todos los partidos. Uno de ellos es la CUP, que ha presentado una candidatura única al Secretariado Nacional del partido; esta propuesta ha sido ratificada por el 88% de la militancia cupaire. El mandato del partido se ampliará, pasando de 2 a 4 años, y quedarán para escoger los nuevos cargos de la dirección de la CUP como pueden ser lo secretario general, el coordinador nacional y dos portavoces.
El nuevo equipo lo forman quince personas cómo son Bernat Lavaquiol, Non Casadevall, Jordina Salvat, Su Moreno, Berta Ramis, Adrià Plazas, Berta Ramis, Glòria Rubio, Blai Taberner, Isabel Llari, Carles Solé, Roger Bigas, Joan Massachs, Jordi Pujol Lizana, Marlene Fautsch y Cesc Manrique.
Estos quince nombres serán los encargados de consolidar la posición de la CUP y los liderazgos del partido anticapitalista desprendido del batacazo electoral de los cupaires el pasado 12-M, cuando se perdieron cinco diputados en el Parlamento y el independentismo perdió la mayoría la cámara catalana.

La CUP se reorganiza con una nueva estrategia
Una vez superada el proceso de Garbí, la CUP afronta su futuro con el nuevo secretariado nacional y un nuevo programa que quiere volver a una estrategia de conflicto, puesto que el “conflicto nos hace crecer” después de “generar espacios de lucha”, reza este nuevo programa. La renovación a la Candidatura de Unidad Popular es totalmente profunda, modificando la estructura territorial de la CUP y mejorando la dirección del partido anticapitalista con la Mesa Nacional y el nuevo secretariado nacional con el cual esperan que produzca un aumento de la eficiencia y la capacidad de respuesta por parte de la CUP.