El expresidente de Esquerra Republicana e impulsor de la lista Militància Decidim, Oriol Junqueras, ha evitado responder a los ataques y acusaciones que hizo la secretaria general del partido, Marta Rovira, sobre su persona durante la conferencia de despedida que ofreció ayer en la sala donde se reúne el consejo nacional del partido. En medio de la crisis interna del partido y ante su deseo de volver a presentarse al cargo de presidente, Rovira acusó a Junqueras de «falta de compromiso» con el referéndum del 1-O, criticó los sucesivos pactos con los socialistas y criticó el «juego sucio» de cara al 30º congreso del partido del próximo 30 de noviembre, pero Junqueras ha evitado el enfrentamiento directo.
Ante las críticas y los ataques de Rovira, el expresidente de la formación republicana ha optado por agradecer “tantas luchas compartidas, siempre al servicio de ERC y del país” a la que hasta hace poco tiempo fue su número dos. «Gracias por todo lo que hemos aprendido a tu lado», ha añadido Junqueras en un breve comentario en la red social X, antes Twitter, dejando de lado las acusaciones de Rovira. De hecho, Junqueras y Rovira han hecho tándem en la dirección de ERC durante trece años en el cargo del partido, pero la relación entre ambos ha quedado totalmente deteriorada tras una etapa de exilio y prisión.
Gracias por tantas luchas compartidas, siempre al servicio de @esquerra_erc y del país, y por todo lo que hemos aprendido a tu lado, Marta! https://t.co/nf3lGviXUE
— Oriol Junqueras 🎗️ (@junqueras) 14 de octubre de 2024
Las relaciones entre Junqueras y Rovira están totalmente rotas y, como ella misma reveló ayer, solo se han visto una vez desde que la dirigente de Esquerra Republicana regresó de su exilio. Concretamente, Rovira detalló que antes de hacer la conferencia para dar explicaciones, pidió a Junqueras y a seis personas de su equipo una reunión, ya que solo se han visto diez minutos en Cantallops (Alt Empordà) el día que regresó de Suiza. Asimismo, Rovira reclamó de nuevo a Junqueras que diera un paso al lado para beneficiar nuevos liderazgos en el partido y lamentó que el exlíder de ERC ha intentado «aprovechar» la desconfianza interna que se ha generado en el seno de la formación con la estructura B, y los ataques a Maragall, «para sacar ventaja en la carrera interna para ganar el congreso».
Rovira tiende la mano a Junqueras
A pesar de todo, Marta Rovira pidió a Oriol Junqueras que todavía estaban a tiempo de cerrar juntos esta etapa de trece años al frente del partido: “Todo ciclo tiene un final. Oriol, este proyecto lo comenzamos juntos y aún estamos a tiempo de terminarlo juntos, y no separados y divididos. Estamos a tiempo de evitar una ruptura”, dijo al final de las dos horas de conferencia, pero, por otro lado, también quiso dejar claro que en el tiempo que le queda como secretaria general de ERC no aceptará “acusaciones gratuitas” contra compañeros de partido. Así, dijo que sería “implacable para mantener la cohesión interna” de la formación.
