Junts per Catalunya ha dado marcha atrás y ha retirado este lunes la proposición no de ley (PNL) que pedía al presidente del gobierno español Pedro Sánchez que se sometiera a una moción de confianza. La decisión de Junts permite a la Moncloa respirar. En palabras de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, «es una buena noticia» y es la constatación de que el gobierno dialoga hasta la extenuación. Por otro lado, la ministra, una de las personas más cercanas al dirigente socialista, ha añadido: «Tenemos capacidad para abordar y discutir con las formaciones políticas las materias que pueden afectar el interés general y que son importantes para avanzar en la hoja de ruta que tiene el gobierno de España».
El argumento que ha expresado el secretario general de Junts Jordi Turull se sustenta en la petición hecha por el mediador internacional -el diplomático salvadoreño Francisco Galindo- para evitar que las posiciones entre ambas formaciones se alejaran aún más. Según Turull, “hay que confiar en el mediador, pero en ningún caso en Pedro Sánchez ni en el PSOE”. El secretario general de Junts ha mencionado hacer un «último esfuerzo» para “intentar sentar las bases de la resolución del conflicto entre Cataluña y el Estado español”.

Un acuerdo que podría llegar en unas semanas
Esta retirada de la moción de confianza por parte de Junts, que debía debatirse este martes en el Congreso de los Diputados, permite al gobierno español respirar en una legislatura que pende de un hilo. No obstante, este gesto de Junts es un impasse y Turull ha lanzado una advertencia a Sánchez de que no se confíe. En todo caso, los juntaires son optimistas y esperan llegar a un acuerdo pronto en temas delicados «que se han estado trabajando hasta ahora«. Junts, de todas maneras, “mantiene la desconfianza con el PSOE”. De hecho, ha calificado la relación de «deteriorada».
Por su parte, fuentes del PSOE estiman que los acuerdos pueden llegar en unas semanas. Las reuniones entre el PSOE y Junts, con la presencia del mediador internacional, son mensuales. Algunos de los temas en los que se podría llegar a un acuerdo es con la oficialidad del catalán en la UE y la transferencia de competencias en el ámbito de la inmigración. En cambio, otros temas, como el papel que los Mossos d’Esquadra deben tener en el control de las fronteras, está más atascado.
El mediador, un testigo «directo y neutral»
En su encuentro con los medios de comunicación, Turull ha valorado el papel del mediador. Para el secretario general de Junts, Francisco Galindo es “testigo directo y neutral tanto de las dificultades y los desacuerdos como de los acuerdos y su grado de materialización”. «Consideramos que su función es esencial para poder llegar a acuerdos que constituyan, porque ese es el objetivo de los encuentros: resolver el conflicto político histórico entre Cataluña y el Estado español», ha concluido.