El colectivo Indesinenter, formado por los 15 secretarios que han abandonado el Secretariado Nacional del ANC, ha anunciado que empiezan una campaña de recogida de firmas para forzar elecciones y un “cambio de rumbo” después de meses de enfrentamientos con la presidenta de la entidad, Dolors Feliu, y su entorno. Para conseguirlo, el sector crítico tiene que conseguir el apoyo de al menos un 5% de los socios de pleno derecho –que a principios del 2022 eran unos 45.000– para convocar una asamblea general ordinaria y entonces poner en el orden del día una votación para decidir si se hacen elecciones anticipadas.
Los críticos del ANC quieren elecciones al Secretariado Nacional para “provocar un cambio de rumbo en la entidad” y recuperar “el camino de la desobediencia”, un objetivo que consideren que se ha abandonado desde que Feliu está al frente de la entidad. “Lamentamos que las prioridades actuales no sean dar fuerza a las bases para enfrentarse al Estado, sino que se limita tan solo a conseguir unos cuántos escaños en el Parlamento”, dice Indesinenter en un comunicado. Los críticos han denunciado en varias ocasiones las trabas de la ANC para poner en marcha la recogida de firmas.

Choque con la ANC por el proceso de recogida de firmas
Hace un par de semanas acusaron a Feliu de intentar “dificultar la campaña” de recogida de firmas porque les exigen que «se firmen físicamente», una condición que limita mucho su capacidad de llegar a los socios descontentos con la actual presidenta. Ahora denuncian que Feliu no ha querido reunirse con ellos para “consensuar el procedimiento para recoger las firmas” y, antes de ir a buscar la mediación del Tribunal Arbitral de Barcelona, han decidido “no esperar más” y sacar adelante la recogida de firmas a través de una página web que estará abierta hasta el 11 de junio.
El sector crítico quiere forzar una asamblea general ordinaria telemática del 12 al 14 de julio con el único punto del día de convocar elecciones al Secretariado General entre el 26 y el 30 de septiembre. Indesinenter insiste que quieren recuperar la ANC “movilizadora” y con capacidad de “paralizar el país” para preparar un “nuevo embate” para hacer efectiva la independencia. Quieren aumentar el número de acciones para “debilitar los pilares de poder del estado”, entre las cuales reconocen que la lista cívica unitaria podría ser un “elemento potente”. Por eso exigen que la entidad respete la “democracia interna” y el comité permanente no se comporte como la dirección de un partido político.