El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha tirado un desafío hacia Junts, a pesar de que en ningún momento los ha querido mencionar explícitamente, en la primera entrevista institucional en TV3 pilotada por la periodista Ariadna Oltra. El nuevo locatario de Palau insta los de Carles Puigdemont a «colaborar» en la reforma de la financiación para Cataluña, la pieza clave acordada con ERC que le ha permitido ser investido como presidente. Ante una legislatura monocolor en que la formación socialista tendrá que buscar el apoyo de buena parte del hemiciclo para implementar sus políticas, el jefe del Gobierno ha instado los juntaires a sumar esfuerzos para mejorar la financiación catalana -la llamada financiación singular: «Hay que tener una mirada larga», ha apuntado.
El presidente de la Generalitat considera que todas las formaciones que apuestan para mejorar la situación económica en que se encuentra Cataluña en relación con el resto del Estado español, entre las cuales hay Junts, «tienen que sumar esfuerzos» para hacerlo posible: «Se me hace difícil pensar que formaciones que dicen que quieren cambiar la financiación no se sumen», ha argumentado Illa, en referencia en el acuerdo logrado con la formación republicana, el cual ha sido criticado por algunas voces juntaires. De hecho, en esta línea, el nuevo jefe del ejecutivo ha recordado a Junts que en los últimos tres años la formación socialista ha estado a la oposición -una tarea que ahora los corresponde a los de Puigdemont- y «siempre ha trabajado de manera constructiva», «fiscalizando cuando ha estado necesario», pero intentando llegar a «acuerdos». Es por este motivo que les pide que «actúen del mismo modo».

Acelerar la ampliación del aeropuerto
Para el nuevo presidente de la Generalitat, otra de las claves de vuelta de la legislatura, y una pieza clave para mejorar la actividad económica catalana, es «la ampliación del aeropuerto». Es por este motivo que Salvador Illa ha anunciado en esta entrevista que el Consejo Ejecutivo de mañana aprobará reactivar la mesa técnica -la cual está acordada entre los dos gobiernos y que se constituyó este pasado mes de enero- para trabajar en el futuro de la infraestructura: «Técnicamente, nos tienen que decir cuál es la manera de incrementar la capacidad, pero mi propósito primero es desbloquear el proceso. Es crucial para la conectividad económica de Cataluña», ha apuntado. Illa ha defendido que su gobierno trabajará siempre desde el «respeto medioambiental», pero ha evitado hacer comentarios sobre si se tiene que ampliar la tercera pista, cosa que supondría eliminar parte del espacio protegido de la Ricarda -uno de los puntos que ha generado más malestar entre el sector ecologista.
Todavía en materia de infraestructuras, Illa también se ha mostrado convencido de mantener el funcionamiento del traspaso de Rodalies, acordado entre el antiguo Gobierno de Pere Aragonès y el PSOE para la investidura de Pedro Sánchez. De hecho, en este sentido, el nuevo jefe del ejecutivo ha sacado pecho de la decisión de «mantener» Pere Macias como el encargado de supervisar el cambio de gobernanza de Rodalies, puesto que ha asegurado que es una figura «alejada ideológicamente» del Gobierno de Isla, pero «un gran profesional muy capacitado por esta tarea».

Incrementar las «políticas públicas»
Durante toda la entrevista, Salvador Illa ha defendido que el principal «horizonte» sobre el cual trabajará es «incrementar las políticas públicas», desde la vivienda -el precio del cual se ha encarecido significativamente- hasta la educación. En este sentido, el presidente de la Generalitat ha dejado muy claro que trabajará bajo la premisa de «acordar» las decisiones con todas las partes de los sectores: «Marcamos una línea, pero con un ánimo de llegar a acuerdos con el sector, los cuales tienen ganas de hacer las cosas muy hechas», ha aseverado Isla, que se ha comprometido a «invertir más recursos» y desplegar medidas para paliar las carencias en materia de Educación y Salud, entre otros, que travesía Cataluña. Aun así, también ha pedido «serenidad» en la población catalana, puesto que admite que la «tercera transformación [tal como Isla denomina a la tarea que adopta en este nuevo curso político]» requiere tiempo.