El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha asegurado que no tiene “ninguna duda” que la operación que ha llevado Jaume Collboni a la alcaldía de Barcelona se repetirá en el Parlamento “si salen los números”. En una entrevista en
Aragonés ha reclamado a los partidos independentistas que demuestren la misma capacidad de entendimiento y trabajen para llegar a este “mínimo compartido” que les permita defender Cataluña después de las elecciones estatales del 23-J. “Es clave que nos volvamos a poner de acuerdo, sin imposiciones y siendo conscientes que hay una diversidad de miradas”. El presidente de la Generalitat ve posible, aunque “difícil”, que ERC, Junts y la CUP rehagan los puentes rotos en los últimos años.
El Parlamento, Barcelona y Girona, motivos de esperanza
A pesar de los constantes reproches cruzados y los pactos con el PSC en muchos ayuntamientos, consejos comarcales y diputaciones, Aragonés cree que todavía hay motivos de esperanza. La investidura de Anna Erre como nueva presidenta del Parlamento, el pacto fallido entre Xavier Trias y Ernest Maragall en Barcelona y el gobierno tripartido en Girona demuestran que ERC, Junts y la CUP todavía son capaces de aislarse del ruido externo y llegar a acuerdos importantes.

En cuanto al 23-J, el presidente de la Generalitat ha hecho suya la propuesta de Gabriel Rufián y ha pedido a los partidos independentistas que se sienten a negociar un “precio” común para investir a Pedro Sánchez en el caso de que el líder socialista necesite sus votos. “No solo se trata de impedir un gobierno PP y Vox”, ha remarcado. Aragonés ha propuesto el derecho a decidir, el fin de la represión, la protección del catalán y la transferencia de recursos económicos y competencias como puntos básicos de esta exigencia común. “Hay que pasar de la dinámica de competencia a una de cooperación”, ha insistido.
La operación Collboni, basada en contradicciones
Aragonés ha vuelto a criticar la operación Collboni, un acuerdo “contra natura” que está basado en “contradicciones”. El presidente reprocha a los comunes que justifiquen su decisión de votar al PSC para facilitar un gobierno progresista en Barcelona cuando hay “más diferencias entre Colau y Collboni que entre Collboni y Trias”. También ha afirmado que la inclusión del PP en la suma “proyecta una sombra de pacto de estado” para cerrar el paso al independentismo. “Barcelona es muy importante y los poderes del estado lo tienen más claro que el independentismo y los políticos catalanes”, ha dicho.