El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, ha comenzado este lunes el nuevo curso político con una entrevista en televisión española (TVE) horas antes de que su homólogo catalán, Salvador Illa, se desplace hasta Bruselas para reunirse con el presidente en el exilio, Carles Puigdemont. Una entrevista que también llega horas antes de que en Madrid se apruebe la condonación de la deuda del FLA -uno de los aspectos acordados con los republicanos para garantizar la pasada investidura- y en Cataluña se ultime el techo de gasto. En referencia a la reunión en Bruselas de mañana, el presidente español ha negado que sirva para negociar los presupuestos del Estado, sino que defiende que se trata de una línea «coherente» con la apuesta de «diálogo» de Salvador Illa.
En esta línea, el inquilino de la Moncloa también defiende que esta reunión demuestra la voluntad de superar el «conflicto» con el independentismo. Una idea de normalidad política que también ha pregonado Illa desde el inicio de la legislatura: «Me parece acertado, porque no podemos mirar atrás y pensar que no hay ninguna lección que debamos sacar de los años de enfrentamiento y conflicto político. Debemos superar conjuntamente el conjunto de la sociedad catalana y también el conjunto de la sociedad de España», ha defendido Sánchez. Así pues, el presidente español niega que el encuentro de Bruselas de mañana tenga alguna vinculación con las negociaciones para sacar adelante los presupuestos españoles, los cuales ya ha asegurado que presentará.

Nueva guerra abierta política por los incendios
En su primera intervención, el jefe del ejecutivo español se ha referido, una vez más, a la gestión política de los incendios, marcada por los reproches constantes entre el PSOE y el Partido Popular: «Es un enorme error ver dirigentes políticos no hacer ninguna referencia a la emergencia climática, que es lo que dice la ciencia», ha lanzado Sánchez, que este mismo lunes ha propuesto crear una agencia para hacer frente a la nueva realidad climática. El presidente español ha cerrado filas con la gestión de su equipo de gobierno y ha defendido que «España está muy preparada para la emergencia», pero ha lamentado la «falta de voluntad política» de algunas administraciones territoriales -en referencia a las que lidera el PP. “Sabemos qué es lo que no funciona: la deslealtad, la precariedad de los trabajadores de las CCAA, los recortes, la privatización y el debilitamiento de las políticas públicas”, ha dicho Sánchez.
En esta línea, el presidente del gobierno español también ha querido recordar que ya fue su gobierno quien declaró la emergencia climática en 2018, y asegura que desde entonces han desplegado diversas acciones para hacerle frente. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que las últimas emergencias climáticas -como la DANA del País Valenciano o los últimos incendios de Galicia y Castilla y León- han despertado diversas críticas: «Y no digo solo la ultraderecha», ha matizado Sánchez, en referencia a los populares. Otra de las cuestiones sobre las cuales ha girado su primera entrevista del curso político es la vivienda, momento en el que también ha aprovechado para disparar hacia el PP y reclamar «la cooperación de instituciones, administraciones y comunidades autónomas» para blindar la ley de vivienda, uno de los pilares de su legislatura.