El PP redobla la presión sobre el PSOE para que no pacte con los independentistas catalanes, en especial con Junts. La número dos de los populares, Cuca Gamarra, ha advertido que negociar la investidura de Pedro Sánchez con Carles Puigdemont «implica cambiar la capital de España, que dejaría de estar en Madrid para estar en Waterloo”. Gamarra ha reclamado «seriedad, madurez y responsabilidad» a los socialistas para intentar buscar un pacto de estado con su partido. Los populares han constatado que están muy solo después de haber unido su futuro al de Vox y ahora intentan arrastrar el PSOE con un acuerdo que excluya a los extremos.
«No se pacta con quién quiere romper España y es prófugo de la justicia”, ha advertido la secretaria general de los populares. El PP defiende que es Alberto Núñez Feijóo y no Pedro Sánchez quien tiene que liderar las conversaciones para formar gobierno porque el líder popular ha “ganado las elecciones” y “asume” la responsabilidad que le corresponde. Gamarra ha celebrado que Vox haya confirmado que no obstaculizarán la investidura de Feijóo. Con todo, el líder popular no tendrá suficiente con los votos de la extrema derecha. El PNV y Coalición Canaria ya han advertido a los populares que no entrarán en ningún pacto que incluya a Vox.

El PP catalán propone un cambio Generalitat-Moncloa
El líder del PP en el Parlamento, Alejandro Fernández, ha propuesto al PSC un intercambio de votos en la Generalitat y la Moncloa. Durante la sesión de control a Pere Aragonès, Fernández ha puesto sobre la mesa hacer a Salvador Illa presidente de la Generalitat si el PSOE garantiza la investidura de Feijóo en el Congreso, puesto que los socialistas serían la fuerza clave para construir una “alternativa no nacionalista” en Cataluña. El dirigente popular ha dicho a Illa que tiene “la oportunidad de acabar con el Proceso ahora que recibe menos apoyo electoral que nunca y esto pasa por quitarles influencia en Madrid en lugar de darles la llave y enviarlos a la oposición aquí”.
“Si cree que ERC y Junts le regalarán la presidencia de la Generalitat es que no ha entendido nada”, le ha espetado. «Ya ganó las autonómicas y ha obtenido un gran resultado ahora, pero mucho me temo que preferirá ser rehén de Pedro Sánchez para que lo utilice de moneda de cambio con los nacionalistas para mantenerse él en el poder”.