La Asamblea Nacional Catalana (ANC) emitió un manifiesto este domingo, 27 de octubre, en el cual alerta que el Parlamento de Cataluña está «secuestrado» desde hace siete años. La ANC considera que el 27 de octubre de 2017, cuando la cámara catalana aprobó la declaración de independencia, «fue la última decisión soberana del Parlamento de Cataluña«.
Después de aquella declaración, aprobada por mayoría absoluta, la ANC recuerda que el Parlamento fue «disuelto, ilegal e ilegítimamente», por el presidente del gobierno español Mariano Rajoy, «convocando él mismo desde Madrid nuevas elecciones autonómicas, sin tener las facultades estatutarias y amparándose en una aplicación fraudulenta y perversa del artículo 155 de la Constitución española».
Un Parlamento «violado» por el poder judicial
Por estos hechos, la entidad independentista cree que, desde entonces, el Parlamento de Cataluña se ha convertido en un Parlamento «basto y secuestrado». «Ha sido violado constantemente por el poder judicial y el Tribunal Constitucional, con injerencias coercitivas hacia sus diputados, impidiéndoles el libre ejercicio de su representación democrática mediante encarcelamientos, inhabilitaciones y exilio, y repetidas amenazas y alteraciones de la correlación de fuerzas surgidas de las elecciones e, incluso, bloqueos forzados de legislatura a medio curso».

Según la ANC, ahora mismo en el Parlamento de Cataluña «no pueden fructificar leyes ni decisiones soberanas» y ha quedado, democráticamente, «devaluado», dice el manifiesto. Y también sostiene que el Estado «está ocupando por la fuerza el Principado de Cataluña desde 1714 y que esta ocupación se ha agudizado más aún desde hace siete años, porque se lleva a cabo contra la voluntad de los catalanes expresada con el Referéndum de Autodeterminación del 1 de Octubre y con la Declaración de Independencia del Parlamento del 27 de octubre del 2017″.
Llamado al pueblo catalán
El texto de la ANC concluye con un llamado al pueblo catalán para que continúe «el camino de la liberación nacional a partir del punto donde lo dejamos hace siete años, con la declaración de independencia, y a retomar el camino hacia la constitución de la república catalana, por medios pacíficos y de lucha no violenta».