Íñigo Onieva ha abierto un restaurante en Madrid con otros socios y, de momento, la crítica gastronómica no está hablando muy bien… por no decir nada. En las reseñas de Google tiene una media de 4,1 sobre 5, que no está mal, pero los comentarios negativos son bastante críticos sobre todo con el servicio que se ofrece en el local.
Entre las peores notas del Casa Salesas, nos encontramos con las siguientes descripciones: «En conjunto, bastante deficiente. Tendrán que ponerse las pilas o cerrarán pronto, mucho a mejorar», «Calidad bastante deficitaria si la comparamos con los precios. Las croquetas, sin sabor. ¿De verdad hay gente que le ha puesto cinco estrellas?«, «Buena comida, pero servicio horrible. Es muy lento e impreciso, una pena un lugar tan guay con un servicio tan malo. No volveré» o «Lleno de fascistas. Precio muy alto y calidad muy mala«.
Esto en cuanto a la gente anónima, entre los que sí que hay que aplauden a la decoración «lugar muy bonito y ambiente

Un crítico gastronómico deja verde al restaurante de Íñigo Onieva
La cosa empeora si leemos la crítica furibunda que ha escrito un crítico gastronómico con más de 120.000 seguidores en Instagram. El portal
El peor de su experiencia en el restaurante ha estado en cuanto a la comida que ha degustado. De los platos que le han servido, solo tiene palabras negativas. El bocadillo de carne y pimiento verde cree que es «infame«, ya que el trozo de ternera estaba «duro» y el pan, «seco». El risotto le ha desagradado todavía más, puesto que lo describe con mucha mala leche: «Papilla insulsa«.
La carne argentina, también un desastre a ojos del experto: «Un desastre todo, como una suela de zapato y completamente insípida«. ¿Y el sándwich de cruasán con helado? Tampoco bueno: «Imposible de comer, ya que todo el helado cae cuando haces el primer mordisco. No entiendo que nadie del restaurante haya visto antes de que este postre no tienen sentido». Al final, solo lo puntúa con un 2 de 10… así que queda claro que lo suspende y por mucho.