Alice Campello y Álvaro Morata se han dejado ver juntos en las puertas de la escuela de sus hijos gemelos, la que supone la primera imagen de la pareja después del anuncio de separación. El futbolista y la
Después de ocho años juntos y cuatro hijos en común, han decidido emprender cada uno su camino y no se sabe muy bien por qué. Ahora los rodean rumores de reconciliación, pero las fotos en sí no demuestran ningún tipo de gesto tierno. Simplemente, han querido acudir juntos al primer día de escuela de los niños. Eso sí, lo han hecho en el mismo coche y, después, han vuelto juntos hasta la casa que compartían en Madrid.
Cuando se supo que habían decidido cortar, muchos medios de comunicación dieron por hecho prácticamente que él le había sido infiel. Alice lo ha defendido sin cesar y ahora lo vuelve a hacer en una de las primeras entrevistas que ha concedido. Lo hace en
Alice Campello explica por qué se ha separado de Álvaro Morata en una entrevista
¿Lo primero que aclara Alice en esta entrevista? Que todavía no han cerrado del todo si se divorciarán oficialmente y cuándo firmarán los papeles: «No hay nada sobre la mesa, todavía no hemos pactado nada. Tengo otras prioridades ahora mismo cómo es pensar dónde viviré con mis hijos». Una cosa tiene clara, por eso, y es que no quieren tener un divorcio tormentoso: «Tenemos los mismos abogados y una relación estupenda. Mataría por Álvaro Morata aún hoy en día», espeta.
Dice esto que no sabe dónde vivirá porque tienen casa en Madrid, pero Álvaro ha fichado por un equipo de Milán y se ha tenido que trasladar allí. Resulta bastante inviable mantener una custodia compartida -si es que llegan a este acuerdo- viviendo en países diferentes. ¿Entonces? No tienen claro qué pasará, pero Alice deja caer que la opción con más números es que ella y los niños también vayan a vivir allí. Además, esto a ella le gustaría porque es su ciudad natal. Todavía no se lo plantea a corto plazo, por eso, ya que dice que el traslado no será inminente porque ni siquiera ha buscado piso.
Alice Campello aprovecha estas palabras en público para volver a insistir en que los cuernos no son la causa de la ruptura: «No hay ninguna infidelidad por su parte y tampoco hay imágenes de nada, es todo mentira. Si la hubiera, yo no hablaría así de él. La gente puede pensar que estoy protegiendo mis hijos, pero no es así».
¿Entonces por qué se han separado? Cree que el problema es que empezaron cuando eran demasiado jóvenes: «Nos casamos muy pronto, yo era una niña inmadura de 21 años». Tampoco ha ayudado que hayan sufrido dos depresiones en los últimos meses: «Yo he tenido depresión posparto después del nacimiento de mi hija y él ha pasado malos momentos por culpa de la presión del mundo del fútbol. No nos hemos venido bien el uno al otro». El tiempo dirá qué acaba pasando entre ellos, pero de momento parece que se lo toman con filosofía.
