Sofía de Grecia nunca ha tenido amigos ni apoyos dentro de la familia de Juan Carlos de Borbón, por lo que parece. El suegro y las cuñadas nunca la han soportado y ahora, muchos años después de su llegada, se ha sabido cómo ha gestionado los desprecios que ha ido recibiendo. La emérita protagoniza un artículo de Pilar Eyre en la revista Lecturas en el que analiza, precisamente, cómo ha sido este rechazo constante hacia ella.
La periodista asegura que Sofía ha vivido situaciones realmente «incómodas», en las cuales las hermanas de su marido la dejaban en evidencia públicamente. Los invitados de varias bodas reales habrían sido testigos de esta falta de entendimiento, hasta el punto de que se sabe que Sofía no tenía ninguna relación con la hermana de Juan Carlos y su cuñado.
Cuando aún eran novios, ella hacía lo imposible para evitar tener que ir a la finca familiar de los Borbón. ¿Y eso por qué? Básicamente, porque notaba que su suegro tampoco tenía ninguna simpatía hacia ella. El hombre ni siquiera se refería a ella por su nombre, sino que la llamaba la griega. Y, más adelante, las cuñadas se posicionarían con él y, por tanto, en contra de Sofía.
El padre de Juan Carlos de Borbón no soportaba a Sofía y ahora se sabe por qué
La cuestión era que el padre de Juan Carlos consideraba que era culpa de Sofía que le hubiera metido en la cabeza que podría llegar a ser rey: «La culpaba de las pretensiones de su hijo y de haberlo apartado de lo único que él deseaba, que era la corona después de toda la vida preparándose para serlo». No contaba con que la aristócrata griega haría lo imposible por agradar a Franco y conseguir que nombrara a Juan Carlos como monarca: «Puso todo de su parte y jugó todas sus cartas porque ella se había casado con quien quería que fuera el próximo rey».
A medida que fueron pasando los años, sin embargo, Pilar Eyre dice que las cosas se fueron calmando y la situación dejó de ser tan sumamente tensa. Cuando los coronaron reyes, Sofía quiso acercarse a sus cuñadas y la cosa mejoró un poco. Ahora bien, la relación nunca llegó a ser cercana.
Si realmente lo pasó mal por no acabar de ser aceptada por la familia, sorprende que haya tratado como ha tratado a Letizia. Ella más que nadie debería saber, entonces, cómo puede llegar a ser formar parte de esta dinastía sin llegar a ser aceptada del todo. Con la joven tampoco se ha esforzado mucho por tener buen rollo, así que al final ha seguido más el ejemplo de las cuñadas que otra cosa.
