La relación de Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin ha estado inmersa en una montaña rusa desde la publicación de las fotos que sacaron a la luz la infidelidad del exduque de Palma. Que lo captaran de la mano de otra mujer supuso un antes y uno después en su matrimonio, que se vio entonces abocado al divorcio. La hija de Juan Carlos y Sofía no se separó de su lado ni siquiera con la imputación por corrupción y el posterior encarcelamiento. Ahora bien, quedar como una cuernuda ante todo el mundo no es un plato agradable…
Cuando se supo que se separarían, estuvieron bastantes meses sin ponerse de acuerdo. Ahora bien, las cosas nunca han llegado a ser demasiado tensas entre ellos, tampoco, ya que ella le ha querido perdonar todo. Esta semana,
Para explicarlo, se remontan en el momento en el que Iñaki entró a prisión. Durante el tiempo ahí dentro se habría inmerso en un tipo de «desconcierto mental» que lo alejó de todo. Y cuando salió en libertad, su carácter habría cambiado radicalmente: «Se trastocó, salió trastornado. Ya no es él«, habría dicho Juan Carlos en su momento.


¿Cómo ha evolucionado la relación de Cristina e Iñaki Urdangarin desde el divorcio?
El emérito tuvo un papel importante en las negociaciones de divorcio de su hija y el yerno. Ella estaba dispuesta a darle todo lo que él pedía, así que Juan Carlos tuvo que intervenir. Ella tenía sospechas que el marido le había sido infiel, pero en un principio estaba dispuesta a perdonarlo. De hecho, explican ahora que Cristina reunió a sus cuatro hijos cuando Iñaki salió de prisión para pedirles paciencia: «Les dijo que su padre necesitaba tiempo para readaptarse y que tenían una crisis que tenían que superar todos juntos«. ¿El problema? Que él, mientras tanto, aprovechaba la libertad para iniciar una aventura extramatrimonial.
Cuando supo que lo había engañado, Cristina se habría quedado «devastada«. Ahora bien, continuaba defendiendo Iñaki con su círculo más próximo y se basaba en la idea que siempre sería el padre de sus hijos. Le da pena ver que Iñaki ha cambiado: «Recuerda al Iñaki de antes y dice que no tiene nada que ver con el hombre de ahora, que es un desconocido y un hombre diferente».
De hecho, aseguran que lo ven con un perfil bajo y humilde: «Todos, Cristina incluida, insisten que este no es Iñaki«. Desde el medio dejan caer que este sería el motivo que explicaría por qué Cristina tiene una actitud tan suave con su exmarido después de la infidelidad, que considera que no es la misma persona que era antes.