Han pasado pocas horas desde que el movimiento histórico de Juan Carlos I salió a la luz. El bufete de abogados Novalex compartió ayer martes 1 de abril que el emérito había emprendido acciones legales contra Miguel Ángel Revilla por «una serie de declaraciones hechas en medios de comunicación entre el mes de mayo de 2022 y el mes de enero de 2025». En este comunicado se indicaba que el expresidente de Cantabria había utilizado «expresiones injuriosas y difamantes que vulneraban el derecho fundamental al honor». Ha sido este miércoles cuando el expresidente se ha pronunciado al respecto en una rueda de prensa. Revilla se ha defendido de las acusaciones de Juan Carlos I, expresando que no entiende la campaña que se ha emprendido contra él. «Es injusto y mezquino ir detrás de un ciudadano sabiendo que al rey no le podemos hacer nada», ha añadido en esta comparecencia ante los medios.

Miguel Ángel Revilla ha parlat davant els mitjans sobre les accions legals que ha emprès l'emèrit | Europa Press
Miguel Ángel Revilla ha hablado ante los medios sobre las acciones legales que ha emprendido el emérito | Europa Press

¿Cómo se enteró de la noticia?

Revilla ha explicado que se encontraba en Vitoria grabando la nueva película de Antonio Resines. ¿La ironía de la situación? El político estaba vestido de juez cuando su esposa le avisó del comunicado. «Mi esposa me hizo un gesto en pleno rodaje porque debía darme una noticia importante». Desde entonces, ha recibido muchas llamadas de apoyo, que «ha agradecido» públicamente.

Ha expresado que no entiende por qué ha sido él el objeto de esta demanda y ha cargado contra «la inmunidad» de Juan Carlos. «Si Juan Carlos no hubiera sido un hombre inmune, probablemente estaría como la señora Le Pen en Francia o el señor Sarkozy con un aparato para localizarlo», ha declarado en la rueda de prensa.

El político lamenta «encontrarse en esta situación» pero afirma que «es un ciudadano más». «No estoy aforado, iré al turno de oficio del juez que me toque y en la ciudad que me toque. Me he rebelado siempre contra las injusticias y la prepotencia de la gente y los privilegios. He sido durísimo con la corrupción del PP, con la Gürtel, con Rajoy, con Zaplana, con Rato, con los EREs de Andalucía, con Ábalos…», indica el político.

El líder del Partido Regionalista de Cantabria ha explicado que en su momento habían tenido buena relación, pero que cuando salieron a la luz todos los escándalos «se le cayó un mito». Aun así, admite que «no se arrepiente de sus declaraciones». «Creo que no he cometido ningún delito, no he dicho nada que no sea cierto ni que estuviera ya explicado», ha apuntado. Por ahora, las acciones que ha emprendido el emérito incluyen «la solicitud de la celebración de un acto de conciliación ante los juzgados de primera instancia de Santander» además de la rectificación de las expresiones y «una indemnización por daños morales de 50,000 euros».

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