Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han acelerado la ofensiva terrestre y han llegado en las afueras de la Ciudad de Gaza en un movimiento que se interpreta como un preludio del inicio de las operaciones de guerra urbana. El ejército israelí ha intensificado los bombardeos nocturnos en toda la Franja de Gaza y asegura haber destruido hasta 600 objetivos militares —almacenes de armas, escondrijos, reuniones de agentes de Hamás y posiciones antitanque—, antes de que las columnas de tanques y blindados avanzaran por el este de la Franja de Gaza hasta llegar a la carretera Salah-al-Din, una infraestructura estratégica porque cruza todo el territorio palestino de norte a sur.
El portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari, se ha limitado a informar que las operaciones terrestres “avanzan gradualmente” y ha declinado hacer cualquier declaración sobre los planes a medio plazo. La gran incógnita es si Israel optará para mantener una presencia fuerte en la zona para cortar de facto la comunicación entre las dos mitades de Gaza y garantizar que sus tropas controlan el paso. De hecho, Salah-al-Din es una de las dos carreteras que el ejército israelí había marcado como vía segura para que los palestinos pudieran abandonar la Ciudad de Gaza y trasladarse hacia el sur. Después de la operación de este lunes, no está claro si continúa siendo un paso seguro para la población civil. El Ministerio de Sanidad de la Franja de Gaza, controlado por Hamás, aprecio que Israel ha matado más de 8.000 civiles durante su ofensiva.

Este fin de semana, el ejército israelí ha enviado más tropas a la Franja de Gaza para afrontar la “nueva fase” de la guerra contra Hamás. El incremento de las hostilidades coincide con nuevos enfrentamientos de Israel con las milicias libanesas de Hezbolá en el norte del país y del aumento de la tensión en Cisjordania, donde cada vez hay más manifestaciones de palestinos contra el gobierno de Netanyahu.
Washington intenta frenar el ímpetu de Israel
La aceleración de las operaciones terrestres ha generado cierta incomodidad a Washington, que ya advirtió a Israel que una invasión terrestre sería un “error grave” y ha reclamado a Tel Aviv que multiplique sus esfuerzos para proteger a la población civil. El presidente de EEUU, Joe Biden, se ha puesto en contacto con Netanyahu para pedirle que no se precipite y para ofrecer asesoramiento militar por la experiencia estadounidense con la guerra urbana en Irak y Siria.
«El presidente ha reiterado que Israel tiene todo el derecho y la responsabilidad de defender a sus ciudadanos del terrorismo y ha subrayado la necesidad de hacerlo de manera coherente con el Derecho Internacional Humanitario que prioriza la protección de los civiles”, ha informado la Casa Blanca. Biden también ha mantenido una conversación telefónica con el presidente egipcio, Abdelfatah al-Sisi, y han coincidido en pedir más ayuda humanitaria y en avisar a Israel que los palestinos de Gaza no pueden ser desplazados a Egipto ni a ningú otro país de la zona.

Israel ha anunciado este lunes una “expansión de las operaciones” a la Franja de Gaza y ha confirmado la entrada de más blindados e infantería para reforzar la campaña contra Hamás. El ejército israelí también ha confirmado los primeros enfrentamientos terrestres entre militares israelíes y milicianos islamistas. «Avanzamos sobre el terreno, identificamos a los terroristas y atacamos desde el aire. También hay contacto directo entre las fuerzas de tierra y los terroristas. Los combates están en marcha dentro de la Franja de Gaza”, ha informado el portavoz del ejército israelí, Daniel Hagari. De momento no se ha hecho público ningún balance de víctimas de las operaciones militares en la Franja.