Cataluña vivirá un viernes que se podría fácilmente catalogar como un viernes veraniego. El sol será el gran dominador de la jornada en todo el territorio nacional en un día que será tranquilo durante las 24 horas del día casi en todo el territorio. Solo en puntos del Pirineo, Prepirineo e interior del cuadrante noreste esta tranquilidad se verá perturbada por bancos de nubes que pueden acabar descargando lluvia sobre las zonas mencionadas. Sobre todo durante la primera parte del día, el viernes será soleado y las máximas se situarán entre los 25 y los 30 grados en toda la nación catalana.
Durante la mañana el ambiente soleado será el gran dominador en todo el territorio con la excepción de la vertiente norte del Pirineo donde el cielo estará medio o muy nublado y puntos de la depresión central donde habrá algunos estratos bajos. Estas nubladas se mantendrán hasta primera hora de la mañana, cuando estas nubes se disiparán. Durante la madrugada es probable que haya pequeños chubascos en la vertiente norte del Pirineo, unos chubascos que desaparecerán de Cataluña hasta el mediodía.

La tarde, el cambio sustancial
Durante la mañana el gran dominador será el sol, pero por la tarde el astro perderá protagonismo. En la mitad norte del país crecerá la nubosidad y el cielo quedará muy nublado. El aumento de estos bancos de nubes a partir de las horas centrales del día se traducirá en chubascos dispersos en varios puntos del territorio como el Pirineo, Prepirineo e interior del cuadrante noreste, una sorpresa en forma de precipitaciones en un día, hasta el momento, dominado por el sol. Al anochecer las nubes se mantendrán y se prevé que se pueda producir algún chubasco débil y aislado en puntos del sector central del litoral. El Meteocat señala que las precipitaciones en Cataluña serán «de intensidad débil, o localmente moderada, y acumularán cantidades mínimas de precipitación».


