Anna Simon (Mollet del Vallès, 1982) vuelve a TV3 con
Vuelve a TV3 después de unos cuantos años, ya que no la veíamos desde
Tengo muchas ganas de estrenar el programa porque lo grabamos el pasado junio y tenía muchas ganas de que, por fin, lo vierais. Estrenar en TV3 es estar en casa, un poco, he hecho varias cosas aquí y me encuentro muy bien con la gente. Estoy con ganas de que vaya bien y deseando que hagamos una segunda temporada, de hecho. Todos los que hemos trabajado aquí estaríamos encantados de volver con otra porque nos hemos reído mucho haciendo este programa. Ha sido muy cansado porque realmente han sido muchas horas de grabación, pero es aquello que dices
El estreno es en
La apuesta está realmente bien y lo agradezco muchísimo. Además, creo que la noche de miércoles es una buena opción porque está bastante bien y espero que tengamos mucho éxito.
Esta franja del miércoles es la que reservan para
Ostras, ¡pues no había caído! Que bien porque yo soy una gran fan de Joc de cartes

¿Es de aquellas presentadoras que se preocupan por la audiencia y al día siguiente mismo de la emisión corren a ver el
La audiencia, al final, es la que determina si continuarás teniendo trabajo o no. Quien diga que no le preocupa nada la audiencia, miente un poco. Tampoco hay que obsesionarse y lamentar que haya bajado una décima, pero está claro que estoy deseando que nos vea bastante gente. Nosotros haciendo el programa nos lo hemos pasado muy bien. Hemos sufrido, pero ha sido muy divertido. Creamos una familia allí en la masía de Llagostera durante aquellas tres semanas. Si la gente que lo ve se lo pasa la mitad de bien que nos lo hemos pasado nosotros haciéndolo, pues perfecto.
La volveremos a escuchar en catalán, lo que hará felices a sus fans de casa.
Sí, pero yo hablo catalán siempre y cada día con los de casa aunque trabaje en Madrid. No he dejado nunca de hablar catalán porque es mi lengua materna. Ahora bien, sí que es cierto que hay gente a quienes les hace especial gracia sentirme en catalán en televisión.
¿La Anna Simon en su lengua y en TV3 es la más auténtica?
Creo que la Anna en catalán y la Anna en castellano son idénticas. Bien es verdad que yo también me siento cómoda en castellano porque, si quieres que te diga la verdad, con mis amigas de la escuela en Mollet siempre hemos hablado castellano. Sí que es cierto que en casa hemos hablado catalán desde siempre y que es mi lengua materna, la lengua en la que pienso. Pero no es eso que digas que me cuesta si hablo castellano. Están las dos lenguas muy integradas.
¿Cómo ha sido verse rodeada de campesinos en
Verme rodeada de campesinos ha sido muy
¿Ha sido fácil la relación entre los concursantes, por ejemplo? Porque no deben de tener nada en común.
Tenemos por un lado a 10 campesinos, 5 chicas y 5 chicos. Y, por la otra, a 10

¿Y qué me puede explicar de la convivencia de gente tan diferente la una de la otra?
Ha sido muy divertido porque la gente siempre tenemos prejuicios, quieras que no. El campesino siempre dice de los urbanitas que vienen con dos maletas y solo piensan en maquillarse. Después conoces las personas y te das cuenta que no son así, eso sí. Porque los de ciudad igual, cuando veían a los de campo se preguntaban qué tenían que enseñarles a ellos. Lo que es muy
¿Y el proceso de casting ha sido fácil? Hay algun
Hay de todo… Hay algún que ya ves que es un personaje, mientras que otros son más serios o todo lo contrario. Todos ellos son muy auténticos y esto traspasa la pantalla, se harán querer porque ahí nadie hace un papel.
El formato da pie a mostrar escenas cómicas como la típica chica de ciudad escandalizada al encontrarse una vaca.
¡Exacto! Imagínate decirle que tiene que coger una gallina a una chica de ciudad que nunca ha pisado el campo. ¡No sabe cómo hacerlo! Y, por eso, tendrá a su lado la figura del campesino. A veces, el

¿A qué
Creo que los niños se lo pasarán muy bien porque hay pruebas muy divertidas, pero ¡la juventud también! Y la gente mayor también disfrutará porque les podrá caer la lagrimita de pensar que aquella tarea la han hecho ellos en el pasado o que han visto a sus padres hacerla.
También puede gustar a los fans de los
Pues sí. Cada equipo consta de cinco parejas, cada una de ellas formadas por un campesino y un urbanita. Los equipos se enfrentan en diferentes pruebas y, en todas ellas, habrá un equipo ganador y el otro perdedor. Aquellos que ganen, podrán dormir en la masía y ahí podrán ducharse, cenar y dormir en una cama. Ahora bien, quienes pierdan dormirán en un tipo de establo con paja en el suelo y allí no pueden ducharse ni dormir en colchones. Habrá nominaciones, ya que el jurado nominará la pareja que peor lo haya hecho y cada equipo también nominará a otra pareja. De estas tres parejas nominadas, dos se enfrentan en una prueba y quien la pierde, pues es eliminada.
¿Ha habido enfrentamientos entre ellos y momentos de tensión?
¡Y tanto! Y creo que es porque se lo han tomado muy seriamente. No hacen un papel, son campesinos y quieren demostrar que lo hacen bien y quedarse concursando. Esto ha hecho que, alguna vez, haya alguna confrontación con el jurado porque no han están de acuerdo con sus valoraciones.

¿Cómo ha sido trabajar con el jurado? Miquel Montoro y Marina Pifarré tendrán un papel muy importante.
A Miquel no lo conocía personalmente, solo sabía quién era por el video de las
Los miembros del equipo hemos aprendido mucho con este programa, sí. En cada emisión vendrá un experto en algún tema determinado para valorar las pruebas y te explican cosas que no sabías y es mucho
¿Ha tenido usted algún tipo de experiencia en el mundo del campo?
Yo no puedo decir que tenga experiencia en el mundo rural. Nunca he vivido en una casa de campesino, pero mi abuela sí que nació en una y mis padres se criaron en dos colonias textiles de Puig-reig, uno en Can Vidal y el otro en Can Marçal. Sí que tenía familiares que tenían ganado y recuerdo que me encantaba ir allí y jugar con los caballos o perros.
¿Cree que la colocarían en el grupo de los
Creo que me pondrían a los
Todavía cuesta mucho que la gente joven tenga ganas de trabajar en el campo. ¿El objetivo de
Lo espero de verdad, ya que aquí hay campesinos muy jóvenes de 18 y 20 añitos que están encantados con esta vida. Ellos me han explicado, sin embargo, que actualmente hacerte campesino sin que te venga de familia es muy complicado porque tienes que hacer una inversión brutal que es probable que no recuperes. Te tiene que gustar mucho y estar muy motivado. Tiene cosas preciosas, evidentemente, pero es una vida dura.
El programa llega en un buen momento y puede reivindicar esta figura, precisamente, porque hace pocos meses veíamos las manifestaciones del sector del campo para pedir más ayudas.
Si mínimamente podemos poner un granito de arena para hacer valer su trabajo, pues bienvenido sea.
¿Cómo le llegó la oferta y qué le vio para decir que sí? Porque no le habíamos visto en un registro así antes.
En un principio me costó aceptar porque, en aquel momento, mi hija solo tenía un año y me daba cosa irme fuera de rodaje tres semanas. Ojalá todos los trabajos fueran así, también te digo, ya que TV3 y la productora me pusieron todas las facilidades y pude estar viviendo en una cabaña de madera con ella en medio del bosque durante el rodaje y fue experiencia. He sido muy afortunada porque el rodaje empezaba temprano por la mañana y acababa tarde por la noche, pero yo tenía ratos muertos y me escapaba para estar con la niña porque estábamos a solo un minuto. Si todos los trabajos fueran así, qué fácil que sería para las mujeres.

La conciliación es bien complicada. En su caso, de hecho, dejó la televisión temporalmente hace ahora dos años cuando fue madre para poder estar con su hija.
Es imposible conciliar. Yo lo puse todo en una balanza y la maternidad se encargó de cerrarme la boca, ya que yo era de aquellas que decían que volvería a trabajar cuando la niña tuviera cuatro meses. Pues, cuando llegó el momento, a mí se me rompía el corazón. ¿Cómo tenía que volver a trabajar y dejar a una bebé tan pequeña? Y yo soy una afortunada porque he podido decidir parar un poco, por desgracia muchas mujeres no pueden hacerlo y tienen que volver a trabajar y punto. Me considero afortunada, ya que conciliar es prácticamente imposible.
Y todavía más en un trabajo como el suyo, con horarios imposibles y el miedo que el teléfono deje de sonar si se para un tiempo.
Precisamente, mis horarios son muy diferentes cada día y tenemos que ir trampeando con el apoyo de la familia. El miedo a que el teléfono deje del sonar existe, ya que yo he decidido estar con la niña y está geial. Ahora bien, ¿y si después no vuelven a llamarme? Juegas con los miedos y con las ganas de estar con ella.
Bien, pero ahora vuelve a televisión y se le ve contenta.
Mucho, la verdad que sí y deseo que vaya muy bien. Ahora mismo rezo que mucha gente vea