El Grupo Especial de Intervención (GEI), la unidad de élite de los Mossos d’Esquadra, integrada por poco más de una cuarentena de agentes y habitualmente muy discreta, se ha activado con la reclamación de mejoras laborales. El motivo es que está en fase de reconfiguración laboral. Así se explicó en la reunión celebrada el pasado 1 de febrero de la Comisaría General de Intervención, la gran área de donde cuelgan unidades como la Brigada Móvil (Brimo), la Área Central de Apoyo Operativo (ACSO), el Grupo de Investigación de Desórdenes Públicos, (GIDOP) y el Grupo de Obtención y Aseguramiento de la Prueba (GOAP).
Precisamente, en este encuentro se puso sobre la mesa una antigua reclamación de los miembros del GEI, una «compensación económica para los jefes de unidad» que hay en cada turno. De momento, y siguiendo el acuerdo sindical que se firmó en 2023, Interior estudia como incorporarla a la nómina y de qué manera se tiene que establecer. Pero no acaban aquí las reclamaciones del GEI que sindicatos como el SPC o USPAC defienden, y es que también quieren la puesta en marcha de una segunda carrera profesional para los miembros del GEI.
En concreto, se trata de establecer una salida profesional «digna» para los agentes que hayan prestado durante un tiempo el servicio en la especialidad del Grupo de Intervención. Hoy por hoy, desde la Comisaría de Intervención no ven mal esta posibilidad. De momento, técnicamente se estudia como incluir esta propuesta en el futuro plan de carrera profesional que ha encargado la Dirección General de la Policía de acuerdo con el nuevo Decreto de Estructura de los Mossos que impulsó el actual jefe del cuerpo, el comisario Eduard Sallent. Una modificación que se tendría que trasladar a la Relación de Puestos de trabajo de los Mossos d’Esquadra.

El plan de carrera, clave
De hecho, este plan de carrera también es una desazón de cara la posibilidad que hace tiempo que aparece por el complejo Egara, la sede central de los Mossos, «de implementar el nivel 5 a los integrantes del GEI». Una opción que hoy por hoy no es posible, ya que la actual mesa retributiva no prevé este nivel. Por lo tanto, la creación de este nivel se tiene que añadir en el plan de carrera que se está negociando.
Por otro lado, este reconocimiento salarial que se reclama para los jefes de unidad del GEI también tendría réplica en los jefes de grupo de la Brigada Móvil. De hecho, también se está revisando la Relación de Puestos de trabajo del cuerpo en sintonía con el acuerdo sindical de 2023. De hecho, la Brimo también está a la espera de una nueva instrucción para regular las guardias no presenciales y, sobre todo, pide que no se ponga ningún tipo de límite al otorgamiento de medallas y reconocimientos a los integrantes de las unidades antidisturbios. Por otro lado, la Comisaría General de Intervención ha garantizado que el próximo 20 de junio finalice el curso de Brimo y poder poner orden en los grupos, los turnos y las guardias que están generando «serias incidencias con el encabalgamiento de vacaciones».
Así mismo, en esta reunión se informó que la subcomisión de materiales tratará la posible adquisición de vehículos blindados para los GEI, así como las incidencias detectadas con la seguridad de las furgonetas de la Brimo. También está en estudio la reparación del campo de prácticas del GEI, la Killer House, que se encuentra en muy mal estado.