El comisario jefe de los Mossos d’Esquadra, Eduard Sallent, no se cree al entorno del presidente en el exilio, Carles Puigdemont, que asegura que el líder de Junts per Catalunya ya ha abandonado el estado español y en la rueda de prensa para hacer balance sobre el operativo policial de ayer no ha descartado que todavía se encuentre en Barcelona. «No trabajamos con suposiciones, ni en partes interesadas», ha manifestado después de que el secretario general de Junts, Jordi Turull, y el abogado Gonzalo Boye hayan asegurado esta mañana que ya no se encuentra en Cataluña y es yendo hacia Waterloo (Bélgica). «No descarto que esté aquí, no puedo dar crédito al que dice la persona que lo ayudó a marchar», ha afirmado.
«Hasta que no tengamos la evidencia que Puigdemont está fuera del alcance de las competencias de los Mossos, seguiremos buscándolo», ha manifestado el comisario, que no ha querido dar más detalles porque «hay una investigación en marcha y no daremos detalles». Sallent lo ha dicho después de que Turull haya explicado en una entrevista en RAC-1 que el líder de Junts se ha ido a Waterloo (Bélgica), donde reside desde el 1-O, y ha detallado que mientras que él ha pasado la noche en Francia, Carles Puigdemont «ya hacía horas que echaba hacia arriba», refiriéndose que ya estaba de vuelta en Bélgica. El abogado Gonzalo Boye, que lleva la defensa del presidente en el exilio, no ha querido dar más detalles, pero también ha asegurado que se encuentra fuera del estado español.
«No sabíamos ni cuando llegó, ni lo sabemos», ha reconocido Sallent después de que el mismo Turull ha revelado que Puigdemont estaba en Barcelona desde martes. El comisario de los Mossos ha puesto en entredicho que Puigdemont sea «el catalán más conocido en el mundo», pero en cualquier caso ha dejado claro que «no lo detectó nadie» en su vuelta a Cataluña. Aun así, ha querido remarcar que en caso de detectarlo, lo habrían detenido.

Detención en el Parque de la Ciutadella y traslado a la Ciudad de la Justicia
Sallent ha defendido que la Policía de la Generalitat «no ha hecho el ridículo en el operativo para detener Puigdemont. Ha sido un dispositivo que no ha conseguido el objetivo de detener Puigdemont. El cuerpo de los Mossos ha estado a la altura del que se le pedía», ha explicado, y ha detallado el dispositivo que tenía preparado el cuerpo para detener Puigdemont, confiando que iría al pleno del Parlamento. El lugar idóneo para detener Puigdemont, ha explicado el jefe de los Mossos, eran los alrededores del Parque de la Ciutadella, que estaba blindado por, según ha reiterado, garantizar el funcionamiento del pleno de investidura.
«No se consiguió la detención», ha reconocido, y ha dicho que «los hechos y las circunstancias impidieron tener la oportunidad de detenerlo en el Parque de la Ciutadella, donde teníamos los vehículos preparados para trasladarlo en la Ciudad de la Justicia». En este sentido, ha explicado que la policía catalana había preparado su traslado en la Ciudad de la Justicia, y también a Madrid si así lo decidía el juez del Tribunal Supremo, Pablo Lllarena. «No hemos acordado nada con el señor Puigdemont ni su entorno», ha subrayado después de que ayer se hiciera correr el rumor que las dos partes habían pactado como hacer la detención.