Nueva crítica europea contra el Estado español por la situación del catalán en las escuelas. El Consejo de Europa ha instado al Estado español a garantizar la enseñanza en catalán “en todos los niveles” educativos. La recomendación del organismo europeo llega después de que el pasado mes de septiembre mostraran «gran preocupación» por la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) en la que se obligaba a los centros escolares catalanes a hacer el 25% de las clases en castellano en la escuela en caso de que las familias lo solicitaran. Una sentencia que el Consejo de Europa calificó de «incompatible» con compromisos ratificados por el Estado en virtud de la Carta Europea de las Lenguas Regionales y Minoritarias.
Es necesario diferenciar entre los organismos europeos, ya que el Consejo de Europa es una organización internacional mientras que el Consejo Europeo lo forman los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea y, por otra parte, el Consejo de la Unión Europea, que defiende los derechos humanos, la democracia y el estado de derecho en Europa.
Garantizar el catalán y las lenguas ‘regionales’ en todos los estamentos
La crítica de Europa no solo se aplica al catalán, ya que la Carta Europea de Las Lenguas Regionales y Minoritarias ha aprobado una serie de recomendaciones para el Estado respecto a la protección y uso del catalán y otras lenguas como el vasco, el aranés, el gallego o el aragonés. El Consejo de Europa reclama al Estado español que garantice la enseñanza también en aranés, gallego y valenciano en sus respectivas comunidades. Además, insta a «velar» para que los procedimientos penales, civiles y administrativos también se realicen en catalán, aranés, vasco, gallego y valenciano si se solicita y que adopten medidas para que se cumpla «en la práctica» en Cataluña, el País Vasco, Navarra, las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana.

Unas reclamaciones que Europa ha hecho extensivas a los centros de salud, donde el Consejo recomienda que el Estado español adopte medidas que garanticen el uso del catalán, el gallego y el valenciano si un paciente lo solicita, y que no se repitan los casos de discriminación lingüística que se han producido en los últimos meses.
Una Europa que mira con preocupación la situación del catalán
La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) hizo que el pasado mes de septiembre el Consejo de Europa ya mostrara su desacuerdo y su «preocupación» por la medida judicial contra el catalán en Cataluña. «El comité de expertos está profundamente preocupado por una serie de decisiones judiciales adoptadas por los tribunales superiores de justicia autonómicos y confirmadas por el Tribunal Supremo, cuya ejecución ha generado incertidumbres sobre el uso de la lengua en la enseñanza en varias comunidades autónomas», tal como reza el informe publicado por el comité de expertos para la Carta Europea de las Lenguas Regionales y Minoritarias.
De hecho, en el informe el organismo europeo recuerda al Estado español que cuando firmó la Carta Europea de las Lenguas Regionales y Minoritarias eligieron el nivel más alto de protección, una elección que implica «impartir una enseñanza con la lengua regional o minoritaria como medio de instrucción». Además, el Consejo de Europa ya rechazó la instauración de cuotas mínimas como norma general sino que «en determinadas escuelas, según su entorno sociolingüístico, salvaguardar el aprendizaje de la lengua oficial del estado puede conllevar la necesidad de reforzar su enseñanza utilizándola como medio de una o más asignaturas». A pesar de ello, el organismo europeo asegura que «fijar un porcentaje mínimo de enseñanza en castellano para cada centro educativo es claramente contrario a los compromisos aceptados por España en virtud del artículo 8 de la carta europea».