La escuela Teide de Viladecans estaba sentenciada y abocada al cierre. Ahora bien, un giro inesperado de última hora ha hecho que la historia sea completamente diferente. El pasado jueves, Ran Liang, un empresario chino que hace diez años que vive en Cataluña, y la misma escuela llegaron a un acuerdo para salvar el centro con solo una condición, que se enseñe chino, según ha informado la escuela en un comunicado.
“La escuela Teide se abre al futuro con una nueva visión renovada y transformada en Colegio Teide Internacional”, aseguran desde el centro educativo en el comunicado. Esta es la solución que la escuela ha encontrado para superar los problemas económicos que sufría desde hacía tiempo. “Los últimos años no han sido fáciles para la escuela Teide”, reconoce la dirección y añade que “como tantos otros centros educativos, ha tenido que hacer frente a retos y dificultades con firmeza y determinación”. A través de las redes, la escuela también ha asegurado que después de dos años colaborando con el Centro Cultural Chino, este nuevo cambio supone «dar un paso hacia la interculturalidad que rige la sociedad».
Ahora, el futuro Colegio Teide Internacional presenta una “iniciativa única” que abre las puertas a los alumnos “para conectar con una cultura milenaria y expandir sus oportunidades en un mundo globalizar”. En este sentido, el centro de Viladecans ofrecerá clases de chino en horario lectivo.
En declaraciones en TV3, el empresario chino ha asegurado que ha querido hacer esta inversión para sacar la escuela de los problemas económicos y porque cree que ofreciendo la posibilidad de estudiar chino hasta la secundaria se podrán a sacar nuevos alumnos en el centro, un hecho que, desde el centro consideran que «enriquece» el proyecto educativo del centro. Además, también ha añadido que poder crecer hablando cuatro idiomas -catalán, castellano, inglés y chino- es muy enriquecedor. Por parte de las familias, se han mostrado «encantadas» de iniciar esta nueva etapa de la escuela.





