Secretarias, profesores y personal de investigación han acusado el catedrático de ciencias políticas y sociales Vicenç Navarro de acoso laboral y abuso de poder en la Universitat Pompeu Fabra (UPF). El personal que ha estado a sus órdenes durante años lo han denunciado en dos reportajes de investigación paralelos publicados a la misma hora por los medios Ara y
Los rotativos recogen el testigo de algunas personas que han trabajado con Navarro durante décadas y han explicado prácticas de maltrato que llevaba a cabo. Según las investigaciones, el 2021, la UPF lo abrió un expediente disciplinario y acabó la relación con el catedrático, tal como ha podido confirmar la universidad a la ACN. Navarro ha negado las acusaciones en ambos reportajes y ha asegurado que sus antiguos trabajadores lo quieren desacreditar y destruir.
Maltrato psicológico y agresiones físicas
Los testigos, entre los cuales hay secretarias, profesores y personal de investigación; han detallado situaciones de maltrato psicológico y agresiones físicas. Además, han asegurado que Navarro se los exigía disponibilidad horaria más allá de los horarios laborales habituales o los encargaba trabajos que no tenían nada que ver con la actividad docente, como por ejemplo llevar ropa a la tintorería u organizarle viajes personales.
También acusan el catedrático de aprovecharse de los investigadores que estaban bajo sus órdenes para escribir artículos de prensa que firmaba con su nombre. Una persona también afirma que hacía trabajos vinculados a En común Podemos y en Podemos. Otras personas que estuvieron bajo su mando lo acusan de apropiación intelectual.
La UPF revisa el caso
El expediente que le abrió la UPF el febrero de 2021 concluyó que había habido «maltrato de palabra y obra» por parte del docente y «abuso de autoridad, encargando trabajos privados y domésticas en horario laboral». En aquel momento, la universidad rompió toda relación laboral con el catedrático.
Ante la publicación de estas informaciones, la universidad ha puesto en marcha una revisión de todo el material en lo referente a Navarro. Uno de los reportajes afirma que el departamento de recursos humanos del centro docente no tenía quejas formales sobre Navarro hasta el 2021, si bien se ha encontrado un documento informal del 2018 en que una persona atribuía un «trato despótico» en el profesor.
