El expresidente de la Generalitat Artur Mas fue la primera víctima del software espía israelí en España y la segunda en todo el mundo después de una periodista mexicana, según un informe de Citizen Lab adelantado por RAC1. Mas, que este lunes comparece en la comisión de investigación del Congreso de los Diputados sobre la operación Catalunya, fue espiado con Pegasus durante cinco años, según él mismo ha reconocido en varias ocasiones, entre ellas en una entrevista con El Món el año pasado, pero ahora se conocen los detalles de cómo y cuándo le infectaron el teléfono. El móvil del expresidente catalán fue infectado hasta 32 veces entre julio de 2015, cuando aún era presidente, y mayo de 2020, según el laboratorio de la Universidad de Toronto que en 2022 destapó el espionaje masivo con Pegasus a una sesentena de políticos, abogados y activistas independentistas.
En este segundo análisis, Citizen Lab detalla por primera vez el alcance del espionaje a Mas. Su móvil fue infectado en fechas clave para el proceso, como el 14 de julio de 2015, cuando CiU y ERC llegaron a un acuerdo para la lista de Junts pel Sí para las elecciones plebiscitarias del 27 de septiembre de 2015. También le infectaron el teléfono el 3 de agosto de 2015, el día que anunció formalmente la fecha de las elecciones, y el mismo día de los comicios. Después, su móvil sufrió hasta 29 infecciones más, entre ellas el 4 de julio de 2016, cuando se reunió con Carles Puigdemont, que entonces ya era presidente de la Generalitat. Uno de los últimos ataques fue en febrero de 2020 durante un nuevo encuentro con Puigdemont en Waterloo (Bélgica).

La advertencia a Artur Mas sobre Pegasus
En una entrevista con este diario a principios de 2024, el mismo Mas explicó que le habían avisado de las continuas infecciones. “Alguien me advirtió. Me dijo ‘ten mucho cuidado porque la gente normal no puede llegar a imaginar lo que se puede hacer a través de un terminal móvil manipulado a distancia o accionado a distancia’. Lo que no me dijeron en ese momento fue que con un virus dentro se puede llegar a llevar toda la información. Desgraciadamente, eso pasó después, el Pegasus es eso. A mí me entraron 32 veces en mi móvil con el programa Pegasus. Entran y salen para intentar no dejar rastro. Se llevaron 500 megas de información. Todo lo que yo tenía en el móvil alguien se lo llevó”.
Todo apunta a que el espionaje continuado a Mas fue obra de España, ya que la empresa israelí NSO solo lo vende a estados. Además, se da la circunstancia de que Mas no aparece en la lista de 18 políticos y activistas independentistas espiados con Pegasus por el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que el Tribunal Supremo autorizó entre 2019 y 2020. Es un caso similar al de otro expresidente de la Generalitat, Quim Torra, o del vicepresidente del Parlamento, Josep Costa, que también fueron espiados con Pegasus fuera del paraguas legal del Supremo.
Mas y Sáenz de Santamaría, en el Congreso
El nuevo informe de Citizen Lab sale a la luz el mismo día que la exvicepresidenta del gobierno español Soraya Sáenz de Santamaría y Artur Mas comparecen en el Congreso por la operación Catalunya. Sáenz de Santamaría estaba citada para el 14 de abril, pero su comparecencia se pospuso porque tenía un viaje planificado. De hecho, la exvicepresidenta del gobierno español era la máxima responsable del CNI durante los primeros años del espionaje continuado a Mas y es muy posible que los diputados le pregunten sobre el informe. El expresidente de la Generalitat está citado como doble víctima de las cloacas del Estado, que filtraron unos audios entre el excomisario José Manuel Villarejo y la exministra de Defensa María Dolores de Cospedal sobre una supuesta cuenta bancaria en el extranjero en plena campaña electoral de las elecciones autonómicas de 2012 para perjudicar su reputación.