El presidente al exilio y eurodiputado de Junts per Catalunya, Carles Puigdemont, ha vuelto a reclamar al consejero de Interior, Joan Ignasi Elena, «la asignación inmediata y con carácter de urgencia» de los mossos d’esquadra de escolta que le correspondan por ley en cuanto que 130.º presidente de la Generalitat de Cataluña.
El jefe de la oficina del presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, Josep Lluis Alay, ha enviado una carta a Elena para recordarle que hace 22 meses le hizo la misma petición, y lamenta que hasta ahora no ha tenido «ningún tipo de éxito, más bien el silencio como respuesta». Por este motivo, Alay reitera la petición y subraya que «el aumento del nivel de peligrosidad y riesgo para su persona, detectado especialmente desde hace algunas semanas, hecho que es público y notorio».
Alay subraya en la carta que «la ley estipula muy claramente que esta es una competencia que recae a la Consejería de Interior» y pose de manifiesto la «grave situación de inseguridad que persiste» desde que persiste más de cinco años después de la creación de su Oficina. «Desde su creación hemos estado reclamando el cumplimiento de esta responsabilidad sin ningún tipo de éxito, más bien con el silencio como respuesta».
La ley del estatuto de los expresidentes de la Generalitat, aprobada el 2003 por el Parlamento, establece que «corresponde en el Gobierno catalán de regular el régimen estatutario de los expresidentes de la Generalitat, determinar los medios personales y materiales que se tienen que poner a su disposición, establecer el régimen de precedencias que correspondan en los actos públicos a que asistan y adoptar los servicios de seguridad que se consideren necesarios».

La reacción de Puigdemont a la condena contra Buch y su exescorta
Carles Puigdemont reaccionó contra la sentencia de la sección segunda de la Audiencia de Barcelona que condena el ex consejero de Interior, Miquel Buch, y el exescorta del presidente Lluís Escolà a cuatro años y medio y cuatro años de prisión respectivamente por los delitos de malversación y prevaricación de los cuales estaban acusados por la Fiscalía. “España está pudrida en sus cimientos y las órdenes del rey de ir por todos nosotros continúan intactos”, sentenció en una piada a X.
Puigdemont ha trasladado toda su solidaridad y afecto a Buch y Monaguillo, y también ha mostrado su «consternación” por este “acto de barbarie que acaba de cometer España, con los jueces y los fiscales al frente”. “El”¡a por ellos!’ guía la política, la justicia y la información, y la verdad importa muy poco”, denunció.