El presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, no ha convencido a sus socios en su comparecencia en el Congreso de los Diputados para dar explicaciones sobre el caso Koldo, ahora ya caso Cerdán, en el que se investigan las presuntas comisiones irregulares a cambio de adjudicaciones de obra pública. A pesar de anunciar un paquete con 15 medidas para luchar contra la corrupción, los socios de la investidura, en mayor o menor intensidad, le han advertido que la legislatura está en peligro. Esquerra Republicana no ha descartado pedir elecciones si el caso Cerdán “escala” a otros dirigentes del PSOE y Junts per Catalunya ha dejado claro a Sánchez que está “en prórroga”, mientras que el PNB y Bildu le han exigido “ejemplaridad” y “decisiones estructurales”, dejando claro que la confianza del presidente español va camino de la UCI. Incluso Sumar, socio de coalición, a través de la vicepresidenta segunda del gobierno español, Yolanda Díaz, ha reclamado al líder del PSOE “resetear la legislatura” con un “cambio de rumbo decidido hacia la izquierda y con cambios de regeneración social”.
Sánchez ha dejado claro en sus intervenciones que no piensa dimitir, pero ha reconocido que pensó hacerlo en los primeros momentos de la crisis generada por el caso Cerdán. “Dar un paso al lado sería lo más fácil, también para mi familia, y que las urnas elijan un nuevo presidente, pero creo que no es la solución”, ha dicho, y ha dejado claro que no piensa tirar la toalla. Asimismo, ha descartado someterse a una cuestión de confianza porque por ahora “no es objeto de debate” en el seno del ejecutivo y ha recordado que los partidos pueden presentar una moción de censura. “Si no la presentan es porque no tienen mayoría”, ha sentenciado después de escuchar las críticas de la oposición y las advertencias de sus socios. Además, ha asegurado que su gobierno es el más limpio de la democracia junto con el del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, frente a la corrupción de los períodos del también socialista Felipe González y de los gobiernos del PP de José María Aznar y Mariano Rajoy.
Yolanda Díaz ha sido la responsable de interpelar a Sánchez por parte de Sumar y le ha exigido un giro decidido “hacia la izquierda” y en materia de regeneración democrática, dado que la forma de “cuidar la coalición” es con normativas publicadas en el BOE y no con meros “gestos”. “Necesitamos hechos, no palabras”, ha añadido, y ha reprochado a Sánchez que hace un año prometió un paquete de 31 medidas de regeneración y que él sabe cuántas se han cumplido. Así, ha vuelto a reafirmar que la ciudadanía exige “certezas” y ha destacado que de la quincena de medidas anunciadas por el presidente, una decena son propuestas que les planteó Sumar. En este sentido, ha pedido el apoyo a la proposición de ley para crear una agencia anticorrupción, poner fin a los indultos a condenados por corrupción, la exclusión del financiamiento público de los partidos financiados irregularmente en España, prohibir contratos públicos a empresas corruptoras o extender la inhabilitación a 30 años para cargos públicos.

Toque de ERC a Sánchez y Junts se desmarca de los bloques
Esquerra Republicana ha dado un toque de atención a Sánchez y a pesar de que ha manifestado que, por ahora, no hay argumentos para hacer caer al ejecutivo, la postura de los republicanos si el caso Cerdán “escala” y afecta a otros dirigentes del PSOE. Junts per Catalunya, por su parte, ha evitado posicionarse a favor de los bloques del régimen del 78 porque “nosotros no somos de ese bloque”, y ha dejado claro que ellos solo pertenecen al bloque que defiende los intereses de Cataluña. Es por eso que le ha reclamado que cumpla los compromisos adquiridos para la investidura y que explique cómo piensa hacerlo. A pesar de ello, ha advertido al líder del PSOE que “usted está en prórroga y no dura toda la legislatura”. Míriam Nogueras, por parte de Junts, ha parafraseado a Raimon para dejar claro que su partido “no elegirá un bloque u otro” y le ha remarcado que su compromiso no es con “la estabilidad” del gobierno español, que ha calificado de “farsa”, sino con los catalanes y Cataluña.
El portavoz de ERC en Madrid, Gabriel Rufián, ha sido muy claro al final de su intervención. “Si esto escala, le obligaremos a que la gente decida” porque, según ha señalado, puede llegar el momento en que Sánchez “no frene a la derecha y a la ultraderecha, sino que su permanencia suponga que cuando la ultraderecha entre lo haga para siempre”. Con todo, ha exigido al presidente español que “pase a la acción” y opte por “entender qué significa el poder” y “competir” con las formaciones que tienen por delante con un programa de medidas “realmente radicales” en el que ha incluido como máxima prioridad la vivienda. “Si quieren que la gente valore las medidas sociales, hagan un programa de medidas realmente radicales. Propongo tres: vivienda, vivienda y vivienda”.
PNB aprieta a Sánchez y le da tres salidas
Las formaciones vascas también han apretado a Pedro Sánchez ante el caso Cerdán y le han lanzado advertencias sobre la continuidad de la legislatura y le han trasladado que la confianza con él está muy tocada. La portavoz del PNB en el Congreso, Maribel Vaquero, ha pedido al presidente español “transparencia” y “ejemplaridad” ante la corrupción, y ha valorado que con la comparecencia de este miércoles ha “perdido la oportunidad de cerrar la crisis”. “Nuestra confianza va camino de la UCI”, le ha dicho, añadiendo que la relación “no puede funcionar en una agonía diaria”. Por todo esto, el PNB ha instado a Sánchez a presentar una cuestión de confianza, dimitir sin disolver la cámara con un nuevo candidato, o a convocar elecciones, tres opciones que el presidente español ha descartado.

En cambio, Bildu no ha ido tan lejos como el PNB, y a pesar de que considera que la situación es “sumamente delicada”, ha advertido que la gente no puede “pagar” los “errores” de los socialistas españoles, en alusión a los casos de presunta corrupción que se investigan. En este sentido, la portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua, ha exigido a Sánchez “contundencia caiga quien caiga”, y que acabe con “la corrupción en las instituciones” y ha pedido “decisiones estructurales y valientes”. “Nos preocupa que esta crisis se lleve los avances en derechos y libertades y abra un ciclo reaccionario y recentralizador de involución democrática y social”, ha puntualizado.
Podemos recuerda a Sánchez que Cerdán, Ávalos y Koldo eran sus amigos “puteros”
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha sido muy contundente en su intervención durante el debate en el Congreso y ha calificado de “absoluta vergüenza” ver cómo cargos del PSOE han usado los mismos argumentos del PP cuando tenía que salir al paso de investigaciones por presunta corrupción. “Ha sido vergonzoso oírle a usted pedir perdón, decir que le engañaron y encargar una auditoría externa de su partido, que es exactamente la misma estrategia que siguió el PP de ‘M. Rajoy’, ha subrayado, y, además, ha reclamado medidas contundentes frente a empresas, sobre todo a las grandes constructoras como Acciona, porque, según ha dicho, su modelo de empresa son las “comisiones ilegales”, y ha afirmado que es “lamentable que vuelvan a la actualidad imágenes de políticos del bipartidismo cerrando contratos públicos en prostíbulos”.
Bellarra ha criticado a Sánchez porque siempre le perseguirá el equipo formado por Ábalos, Cerdán y Koldo: “Qué dream team de regeneración democrática y feminismo” montó en el PSOE, ha dicho, y los ha definido como “sus amigos puteros”. Además, ha calificado de “aún más decepcionante” de lo que se esperaba al reprochar de medidas “cosméticas” su anuncio de 15 medidas de regeneración. Finalmente, el diputado de UPN, Alberto Catalán, ha pedido a Sánchez que “dimita”. “No solo hará un favor a España sino a su propio partido”, ha sentenciado.