La candidata del PP y ganadora de las elecciones en Extremadura, María Guardiola, ha tendido la mano a Vox para gobernar juntos tras su triunfo sin paliativos de este fin de semana, donde obtuvo 29 escaños y un 43,2% de los votos. A pesar de los resultados históricos en la comunidad, Guardiola necesita al menos la abstención del partido de Santiago Abascal para ser reelegida y no ha tardado ni 48 horas en ofrecerles un pacto. En una entrevista en la COPE, la candidata popular ha asegurado que quiere “liderar un gobierno estable que continúe con el cambio social y económico iniciado en la región hace dos años y medio”, pero ha reclamado a Vox un “compromiso de seriedad, gestión y trabajo” si quiere formar parte de su ejecutivo, ya que en la anterior legislatura los de Abascal también entraron en el gobierno extremeño y no duraron ni un año.

Guardiola recoge así el guante que le lanzó Abascal este lunes, cuando advirtió que si el PP quiere el apoyo de su formación, sus votos no pueden ser “invisibilizados”. En una rueda de prensa para valorar los resultados electorales de Extremadura, que abren el nuevo ciclo electoral español, Abascal aseguró que la “pelota está en el tejado” de los populares. “Da igual lo que pida”, dijo. «Lo que no pasará es que se invisibilicen los votantes de Vox». Por su parte, el candidato del partido de ultraderecha en Extremadura, Óscar Fernández, trasladó toda la responsabilidad de un hipotético pacto a Guardiola. “Ella ha obtenido mayor representación, debe encargarse de formar gobierno y si cree que puede hacerlo con Vox, deberá ponerse en contacto con nosotros. Puede hacerlo con el PSOE”, añadió.

Feijóo y Guardiola en un mitin en Navalmoral de la Mara, en Cáceres | ACN

Una abstención del PSOE, una opción «sensata»

Con todo, la candidata popular ha criticado que Vox se haya pasado la campaña electoral atacándola a ella y a su partido porque considera que se han equivocado de adversario. Guardiola ha destacado que las elecciones del pasado domingo demuestran que la región ha expresado el deseo mayoritario de un gobierno en solitario del PP y ha reclamado responsabilidad al resto de partidos para no bloquear la investidura. De hecho, la dirigente popular ha calificado de “sensata” la propuesta del expresidente socialista de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, sobre una posible abstención del PSOE para evitar que el PP dependa de Vox.

La portavoz de la Ejecutiva del PSOE, Montse Mínguez, ha dejado en manos del PSOE extremeño y sus militantes la decisión de facilitar o no la investidura de Guardiola. En una entrevista en TVE, Mínguez ha recordado que en 2023, cuando Guillermo Fernández Vara ganó las elecciones autonómicas —empatando a 28 escaños con el PP—, los populares prefirieron pactar con Vox y recuperar la presidencia de la comunidad tras ocho años de gobierno socialista. “Serán los militantes quienes decidirán”, ha dicho la portavoz. “En cualquier caso, es una pregunta que siempre se nos hace a los socialistas cuando gana el Partido Popular y que cuando gana el PSOE no se hace al PP”, ha criticado. “El PP, siempre que puede, sale corriendo a pactar con Vox”.

El PP, a por todas contra el PSOE por el auge de Vox

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y varios barones territoriales del partido han acusado a Pedro Sánchez y al PSOE de dar alas a Vox y han asegurado que las elecciones extremeñas muestran que hay un “trasvase” de votos de los socialistas al partido de ultraderecha. Los de Santiago Abascal dieron la sorpresa en los comicios del domingo y pasaron de 5 a 11 escaños, mientras que el PSOE ha perdido 10 en poco más de dos años y ha caído de 28 a 18. Esta decena de escaños perdidos se los ha repartido Vox (6), Unidas por Extremadura (3) y el PP (1). La derrota socialista ha sido tan evidente que su candidato, Miguel Ángel Gallardo, ha dimito como secretario general autonómico. 

En su intervención ante la Junta Directiva Nacional este lunes por la noche, Feijóo reclamó a Sánchez que replantee su estrategia “de alimentar el miedo” a Vox porque solo da visibilidad a la ultraderecha y ha recordado que la mejora de los de Abascal “no es a costa del PP”, que prácticamente ha obtenido los mismos votos que en las elecciones de 2023. El PSOE, en cambio, ha perdido más de 100.000 y Vox ha ganado 40.000. Estas cifras muestran que buena parte del electorado socialista se ha quedado en casa y una parte ha cambiado de partido, aunque ahora mismo es difícil saber qué proporción de votantes del PSOE ha optado por Vox en estas elecciones. El líder del PP también reclamó a Vox “responsabilidad y proporcionalidad” y que no se equivoque de adversario “nunca más”.

Comparte

Icona de pantalla completa