Esquerra Republicana y Junts se han desplazado este sábado hasta el País Vasco para participar en una movilización del colectivo soberanista Sare donde han exigido al estado que frene el trato que reciben actualmente los presos vascos relacionados con ETA. Por un lado, el portavoz de Junts, Josep Rius, ha pedido que se ponga fin «al trato de excepcionalidad que están perpetrando contra los condenados vascos». Así lo ha asegurado en unas declaraciones a la prensa desde Bilbao, donde también ha reclamado el «fin de la excepcionalidad» que sufren los presos vinculados con ETA y ha apoyado a «la reconciliación y la convivencia» en el País Vasco, «reconociendo todo el dolor que tienen las víctimas». Con el lema ‘Claus para la resolución’, Sare ha convocado una manifestación en la capital de Vizcaya para exigir que se acabe con el que consideran una política de excepción con los presos de ETA.
Por parte de ERC, la portavoz adjunta en el Congreso, Teresa Jordà, ha rechazado este sábado las «medidas de excepción» que se aplican a los presos de ETA y ha advertido de la existencia de «conflictos» que «nunca tendrían que haber salido de la política». Jordà ha explicado que su presencia a la movilización se debe «al compromiso de Esquerra Republicana con la fraternidad entre los pueblos» y, sobre todo, «en la defensa con las causas a favor los derechos, no solo fundamentales, sino también humanos».
Por eso, la ex consejera ha afirmado que ERC se une «una vez más, al rechazo de estas medidas de excepción, que en el actual contexto no tienen ninguna razón de ser». La portavoz adjunta de ERC ha asegurado que su formación se mantiene «siempre junto al pueblo vasco» porque en Cataluña y Euskadi los «unen anhelos democráticos y nacionales, siempre a través de la paz y del diálogo». «Estamos ante conflictos políticos que nunca tendrían que haber salido de la política y hoy es un buen día también para reivindicarlo», ha concluido.
Jordà no ha sido la única que ha participado en la marcha por parte de los republicanos, puesto que el senador Joan Queralt ha defendido la adhesión de ERC a la jornada «como demócratas, como fraternos colegas de pueblo vasco» para reclamar «una cosa que cualquier demócrata tiene que pedir: la aplicación igualitaria de la ley, una ley sin discriminación». «Una ley que no deje a la gente atrás, una ley que nos aplique como venganza. Mientras esto no sea así, estaremos juntos en esta lucha por la democracia, la libertad, la paz y la prosperidad», ha añadido.