Las negociaciones para aprobar los presupuestos de Cataluña continúan encalladas. El Hard Rock continúa siendo el escollo que bloquea las cuentas catalanas, pero no es la única condición por la cual el Gobierno de Pere Aragonès todavía no ha conseguido lograr una mayoría para salir adelante los presupuestos. Los comunes han fijado destinar 1.000 millones de euros y la regulación de los alquileres de temporada como una nueva línea roja para dar su apoyo a las cuentas del ejecutivo, por lo cual, sin el compromiso de Aragonés ante estas cuestiones, las negociaciones continuarían sin llegar a buen puerto. Así lo ha dicho la presidenta de grupo parlamentario, Jéssica Albiach, en una rueda de prensa a la sede de la formación, en la cual ha querido recalcar que «la vivienda» es una de las grandes prioridades de su partido.
Albiach ha pedido en el Gobierno que fije una regulación para controlar los alquileres de temporada, puesto que, en estos momentos son, desde su punto de vista, «la puerta de atrás» para incrementar los precios del alquiler. Para la portavoz de los comunes, es necesario que el ejecutivo catalán cree una regulación propia para «cerrar» esta puerta abierta y evitar que los locatarios hinchen los precios de la vivienda. Consideran que una buena manera de frenar los incrementos de precio sería llevar a cabo alguna modificación al Código Civil, especialmente tipificar de manera clara qué se considera alquiler de temporada y que no cumple los requisitos para serlo. Sin una regulación de este tipo, los comunes mantendrían su ‘no’ a los presupuestos.

Tira y afloja por el Hard Rock
Los comunes también mantienen la negativa a salir adelante el Hard Rock como una línea roja para aprobar las cuentas de la Generalitat. Después de que Aragonés defiendes durante el monográfico sobre la sequía de este pasado martes en el Parlamento que el proyecto cuenta con el apoyo mayoritario para salir adelante, Albiach ha aprovechado las declaraciones del presidente para cargar contra los presupuestos: «Pues no entiendo por qué no aprueba las cuentas con esta mayoría», asevera. La portavoz de los comunes ha insistido que se trata de un «disparate» y ha advertido que son «gente de palabra» y que no aprobarán las cuentas si el proyecto continúa adelante.