Harry de Inglaterra vuelve a ser protagonista después de la polémica entrevista que ha compartido en la BBC. Sus declaraciones llegaban después del último revés judicial del hijo menor de Carlos III de Inglaterra, que ha perdido la batalla legal contra el Gobierno británico por su protección. Una petición para tener guardaespaldas financiados por el país en sus visitas a Inglaterra.
Tras esta decisión judicial que salió a la luz el pasado viernes 2 de mayo, el marido de Meghan Markle compartió sus reacciones a la noticia en una entrevista bomba en la que ha hablado sobre su relación con la familia real británica y sobre todo con su padre.

Las polémicas declaraciones de Harry de Inglaterra
Hace años que la relación de los royals británicos es complicada. La decisión de Harry de desvincularse de la corona para irse a Estados Unidos con Meghan Markle ha sido uno de los temas centrales de los tabloides y continúa siéndolo después de las polémicas declaraciones del hermano menor de Guillermo de Inglaterra. En esta entrevista en la BBC, expresa que se siente «dolido» por la decisión judicial tras perder la batalla legal por su seguridad en el Reino Unido. «No puedo ver un mundo en el que pueda llevar a mi esposa y a mis hijos de vuelta al Reino Unido y el punto es que se lo están perdiendo todo. Amo mi país y lo extraño, a pesar de las cosas que hayan podido hacer algunas personas y es triste porque no podré enseñárselo a mis hijos», lamenta Harry.

La relación con su familia
Uno de los puntos más destacados de la entrevista ha sido su relación actual con la familia, sobre todo con su padre, Carlos III, delicado de salud por el tratamiento contra el cáncer. Explica que actualmente no se habla con su padre y que le pidió «que se mantuviera al margen» del tema de la seguridad. «Solo puedo venir al Reino Unido de manera segura si me invitan. Me encantaría reconciliarme con mi familia. No tiene sentido continuar peleando. La vida es preciosa», expone. «No sé cuánto tiempo le queda a mi padre. No me habla por este tema de la seguridad». Admite que «ha habido muchos desacuerdos» entre su familia y él, pero que «ahora los había perdonado». La relación familiar es difícil, sobre todo a raíz de la publicación del libro. «Sé que hay muchos miembros de mi familia que no me perdonarán por haber escrito este libro y por otras cosas, pero me gustaría reconciliarme», expresa. Una situación que pone en el centro de todas las miradas las fracturas de la familia.